El yogurt

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Hace 6 años escribimos un artículo sobre el yogurt para ésta revista y del cual recibimos muchos comentarios y correos electrónicos, para profundizar este tema ahora creemos que es oportuno poder volver a mencionarlo.

El yogurt conocido ya hace muchos años atrás por Cleopatra y las mujeres persas por sus propiedades antienvejecimiento para la piel, también ya sospechaban que se encontraban ante un gran alimento.

Este derivado lácteo contiene más de un centenar de millones de organismos que nos aportan beneficios concretos a nuestra salud.

Uno de los beneficios más importantes es la repoblación de la flora intestinal después del uso de antibióticos y procesos diarreicos prolongados. Pues se sabe bien que tan sólo una dosis de antibiótico va a modificar la flora intestinal radicalmente lo cual repercutiría de forma importante en la digestión de nuestros alimentos y la inmunidad.

Dentro de sus características nutricionales del yogurt encontramos que tiene mayor cantidad de proteínas que la misma leche.

El consumo regular de yogurt se ha relacionado con bajas incidencias de infecciones intestinales así también como la prevención de enfermedades dentales como la periodontitis. La universidad de Tokio aporta un dato interesante sobre el yogurt y la salud bucodental. Según una investigación realizada en esta universidad los niños que bebieron yogurt al menos 4 veces a la semana tenía un 22% menos probabilidad de desarrollar caries.

Y no de menos importancia está los beneficios sobre el peso, el consumo regular de yogurt logra mantener pesos saludables para sus consumidores.

Dentro los yogures que se recomiendan están los semidescremados y los naturales sin azúcar, la clave para ocultar el sabor amargo del yogurt sin azúcar es licuarlo con frutas dulces sin agregar azúcar.

Recuerda, "Comer te hace bien pero estar en movimiento más aún"

(*) Médico Especialista en Nutrición y Medicina Estética

Centro de Nutrición y Medicina Estética "VIVIR"