Domingo 08 de octubre de 2017
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Muchos gobiernos han querido destruir a la organización sindical del magisterio boliviano, por resistir a las imposiciones verticales de polÃticas educativas, traÃdas y aprobadas fuera del paÃs, excluyendo a los maestros, acusándoles por la crisis educativa. Diferentes gobiernos han traÃdo pedagogos, psicólogos, humanistas, modelos educativos, de paÃses ricos, que han sido ajenos a nuestra realidad, con valores morales, espirituales, culturales, sociales y económicos de otras latitudes del mundo, queriendo mejorar nuestra educación boliviana al modelo europeo.
La educación boliviana es el reflejo de la estructura de la economÃa liberal, de dependencia, conservadora, consumista y atrasada, formándose a los estudiantes con mentalidad y valores extranjeros. Los maestros revolucionarios se han dado modos, formas, estrategias de lucha contra los gobiernos feudales, democráticos, dictatoriales, haciendo escuelas clandestinas, con contenido liberador con un modelo educativo propio, expresando la realidad socioeconómica de nuestro paÃs.
La educación liberal, neoliberal a excluido a la realidad social, cultural y económica de nuestras nacionalidades. El maestro boliviano a pesar de las diferentes polÃticas educativas, impuestas por los gobiernos de turno, ha tenido el coraje de enfrentar, hacer respetar sus derechos, experiencias, defendiendo los intereses de los trabajadores, de las ciudades y del campo, ha sido parte de la recuperación democrática del paÃs.
