La práctica de la meditación (parte 3)

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Como ya habíamos mencionado al principio de éste artículo, la práctica de la meditación consiste en tratar de llegar a un estado de silencio interior, y uno de los efectos que se produce cuando se llega a ese estado, es la paz y la tranquilidad, pero la paz solo adviene a nosotros cuando hay silencio interior, obviamente la paz no puede reinar en ningún lugar donde haya ruido y caos, pero para llegar a ese estado de silencio interno absoluto es necesario callar el ruido interno de nuestra mente. Normalmente nosotros tenemos una mente caótica que piensa las 24 horas del día, incluyendo las horas de sueño, siempre estamos pensando y razonando, recordando, imaginando y teniendo siempre un diálogo interno con nosotros mismos, curiosamente vivimos en un mundo interno, en un constante diálogo con nosotros mismos, más que en un mundo externo y no nos damos cuenta de ello.

La meditación es una práctica antigua que se practicaba en muchas culturas milenarias y tuvo muchos nombres de acuerdo al lenguaje que utilizaba cada cultura; desde que esta práctica se conoció en nuestro medio en el mundo occidental, se la denominó o se la tradujo con la palabra meditación, aunque en los lenguajes del mundo occidental la palabra meditar, según el diccionario significa; "pensar y considerar un asunto con atención y detenimiento para estudiarlo, comprenderlo bien, formarse una opinión sobre ello o tomar una decisión". Sin embargo, la práctica de la meditación, como ya hemos mencionado, no significa precisamente eso, ya que dentro de esta práctica lo que se pretende es precisamente trascender el pensamiento, la dualidad, la imaginación fantasiosa, el diálogo mental interno con nosotros mismos, las emociones, etc., es decir trascender la mente, por esta razón es que el término meditar no sería el más adecuado para denominar esta práctica. Dentro de la cultura Indostaní a ésta práctica o a este trabajo de tipo espiritual o religioso se le denomina "el camino del Yogui". Un yogui es aquel que practica yoga y el término yoga se traduce como unión, en realidad se refiere a un tipo de unión con la Divinidad, con el Espíritu o con Dios; por lo tanto es más correcto denominar a esta práctica con el término yoga, pues es una herramienta cuyo fin es unirnos con la Divinidad y así obviamente conocer muchos misterios y revelaciones de tipo espiritual, tanto de cada uno de nosotros como del universo entero.

Por todo lo explicado, concluimos en que la práctica de la meditación resulta ser algo más que interesante y vale la pena experimentarla, pues la meditación trascendental no es solo una práctica atribuible a los monjes budistas, hindús o tibetanos; no, la práctica de la meditación trascendental pertenece a la Sabiduría Universal pues se la encuentra en cualquier religión, en cualquier cultura antigua; y como quiera que es universal, es también aplicable a cualquier culto, religión, contexto o filosofía.

Fuente: LA PATRIA