Jueves 16 de mayo de 2013
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Bolivia se convirtió en los años recientes, desde que asumió como presidente Evo Morales, en un país que pretende estar a la vanguardia del cuidado del medio ambiente con la política de protección a la Madre Tierra.
Una acción positiva, aunque muy discutida entre los afectados, fue la prohibición para internar automóviles con más de cinco años de antigüedad, pues los gases que emiten aquellos son altamente tóxicos para el ambiente y era una forma de evitar que otros países asuman que Bolivia es el botadero de todo lo que a su población no le sirve.
No obstante, aún vemos en circulación vehículos más antiguos que echan humo negro, maloliente y contaminante, que no sólo daña al medio ambiente sino también la salud de los seres vivos que respiran esos gases.
En las ciudades, algunos colectivos, minibuses y taxis van por las calles, especialmente las del centro, emitiendo esos gases que causan malestar entre los transeúntes que los respiran inevitablemente.
En las carreteras, son principalmente los ómnibuses los que van dejando una estela de gases contaminantes en las poblaciones apostadas a los costados de las carreteras.
Fuente: LA PATRIA