Para salir de la espiral de discursos y buenas intenciones, hay necesidad de pasar de la teorÃa a la práctica, que en minerÃa se traduce como inversión para prospección, exploración y la consiguiente explotación de minerales. Lamentablemente, las condiciones no son las mejores, de ahà que se planteó de manera oficial al gobierno (de turno), la flexibilización de la Ley de Inversiones, disponiendo la suficiente seguridad jurÃdica, para garantizar la llegada de mayor inversión privada externa, pero al mismo tiempo se pueda motivar la participación de inversionistas nacionales, que han estado reclamando la apropiación de reglas claras de juego, especialmente actualizando y reglamentando la Ley Minera 535, hace más de 5 años promulgada y convertida en una normativa que frena las iniciativas de emprendimientos para "reactivar" la minerÃa nacional.
Para salir de la espiral de discursos y buenas intenciones, hay necesidad de pasar de la teorÃa a la práctica, que en minerÃa se traduce como inversión para prospección, exploración y la consiguiente explotación de minerales. Lamentablemente, las condiciones no son las mejores, de ahà que se planteó de manera oficial al gobierno (de turno), la flexibilización de la Ley de Inversiones, disponiendo la suficiente seguridad jurÃdica, para garantizar la llegada de mayor inversión privada externa, pero al mismo tiempo se pueda motivar la participación de inversionistas nacionales, que han estado reclamando la apropiación de reglas claras de juego, especialmente actualizando y reglamentando la Ley Minera 535, hace más de 5 años promulgada y convertida en una normativa que frena las iniciativas de emprendimientos para "reactivar" la minerÃa nacional.
Opinan los expertos
En criterio de un destacado economista y empresario privado, "la polÃtica de promoción de las inversiones tiene que ser integral, los parches aislados no funcionan. Un ejemplo en el paÃs es la Ley de incentivos para la inversión en el sector petrolero, que resultó un fracaso".
El profesional añade otro detalle, al indicar que no se puede dejar de lado la productividad aunque lamentablemente nuestro paÃs está entre los que tienen menores Ãndices productivos, lo que deriva en el incremento de los costos de producción, que a su vez hace menos competitiva la tarea de exportar", un análisis realista sobre la minerÃa nacional.
Otra opinión profesional sobre el tema, señala que "el sector privado exige reglas claras de juego previsibles para las inversiones, además de seguridad jurÃdica y protección a los capitales", con un añadido que tiene que ver con el sector laboral, lo que implica, dice el analista, garantizar fuentes de empleo digno y sostenible en el tiempo, lo que significa asegurar todo el esquema productivo, administrativo y tecnológico, para disponer de proyectos que sean el resultado de buena planificación, necesaria inversión y garantÃas de operación, algo que en el tiempo presente "es sólo un buen propósito de algunas autoridades, pero carente del respaldo legal actualizado". Una referencia directa a la "inutilidad" de la Ley 535 de MinerÃa y Metalurgia, promulgada hace cinco años y carente de un reglamento que la haga norma operativa para impulsar la actividad minera, en todos sus niveles, pues no se trata sólo de activar un sector, por decir el estatal, descuidando el privado, mediano y chico, o el cooperativista. Un buen reglamento hará que la Ley de MinerÃa sea instrumento de desarrollo del sector y no una tranca a su crecimiento.
No se ha generado ni un solo proyecto minero de avanzada hace más de diez años, la extracción de minerales corresponde a los viejos yacimientos tradicionales y es ridÃcula la posición de las autoridades mineras que han demostrado total ineficiencia, pues tampoco y en muchos años han podido reestructurar la estatal minera, para crear una nueva polÃtica minera de reactivación de todo el sistema. Se aclara que los planes del litio en los salares de Oruro y PotosÃ, se desarrollan en otra estructura, como sucede con el hierro del Mutún en el distrito de Santa Cruz, ambos marchan lentamente.
Se trata de propugnar una nueva dinámica en la minerÃa nacional, de modo que en base a garantÃas, incentivos y financiamientos apropiados, se muevan todas las condiciones favorables a la captación de inversiones, la mejor manera de promover una nueva corriente de emprendimientos mineros, privados y estatales, allà donde sea posible invertir y emprender proyectos de envergadura como lo avizoran expertos en minerÃa.
Cerramos el tema, con esa recomendación de expertos para que desde el Gobierno se aplique una polÃtica especial de promoción de las inversiones, naturalmente luego de sanear las deficiencias vigentes en la normativa que rige la actividad minera, la ley 535 sin reglamento desde el 2014.
Medios. Agencias.
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