Ingresan vehículos "chutos" sin control del Gobierno
27 feb 2012
Por: Edmundo Rocabado V.
Después de la errada disposición gubernamental a través de la Ley de Nacionalización de Vehículos que ingresaron al país por la vía del contrabando, hubo notable receso de la actividad ilegal; sin embargo, a dos meses de aquella ley astutamente elaborada por la Asamblea Plurinacional, retornó la actividad febril del contrabando de motorizados denominados "chutos" por la extensa zona fronteriza con Chile para concentrar los vehículos en Challapata, provincia Avaroa distante a 100 Km. de la ciudad de Oruro.
En este momento el auge del contrabando es notorio sin que autoridades y policías que integran el Control Operativo Aduanero (COA) puedan frenar el movimiento ilícito, porque el Gobierno es incapaz de otorgar seguridad y medios adecuados a los policías para que el control se haga más efectivo, no sólo en el contrabando de vehículos motorizados sino en otra clase de mercadería de la línea blanca, telas, calzados que inundan los mercados en muchas ciudades del país.
Recientemente, cinco miembros del COA fueron emboscados y maltratados por contrabandistas cerca a la población Cochabambina de Anzaldo, cuando los interceptaron con cuatro vehículos y puestos a disposición del Ministerio Público; pero, a pocas horas del incidente los contrabandistas fueron liberados en puertas de la Aduana Regional de Cochabamba. La opinión para liberar a los contrabandistas fue haber decomisado las tres vagonetas y un minibús, "pero no corresponde la aprehensión de los propietarios menos de los 10 arrestados que participaron en la emboscada", según la opinión de un fiscal.
Bajo este accionar del Gobierno y la Justicia, la Policía queda atada de manos en su lucha contra el contrabando; primero, porque no tiene respaldo de las autoridades del Gobierno central que prefieren cerrar los ojos a tanta realidad, existiendo leyes para sancionar a quienes cometen delitos en flagrancia.
El colega Humberto Vacaflor Ganam en diversos medios de comunicación hace interesantes consideraciones sobre las incongruencias del Gobierno al referirse a la emboscada de funcionarios del COA, cuyos autores eran contrabandistas liberados sin que la policía y sus jefes puedan hacer algo para sancionar a los delincuentes. También hace mención a que el Gobierno a través de la Aduana es incapaz de controlar el contrabando de garrafas de gas licuado, gasolina y diesel que van para el exterior del país, menos responde a Chile cuando reclama sobre 1.500 vehículos robados traídos a Bolivia, pero la policía responde que sólo son 1.400.
El contrabando se intensifica no sólo por Challapata, sino por Patacamaya, Tambo Quemado, Charaña y Anzaldo, población Cochabambina que limita con el departamento de Potosí. Lo que llama la atención es que el contrabando de ropa usada continúa aumentando pese a que hace 3 años hubo la prohibición de venta de aquella mercadería convertida en seria amenaza a la industria textil y manufacturera boliviana obligando a sus propietarios a cerrar sus talleres.
El contrabando de motorizados y diferente mercadería que ingresa al país perjudica la economía nacional y obliga a autoridad del Gobierno Central y a la misma Aduana Nacional mayor efectividad para el control, incluso, poniendo los ojos sobre los comerciantes que no emiten facturas cuando entregan al comprador una lavadora, refrigeradores, microondas y otros artefactos de la línea blanca que superan los cien, quinientos y hasta mil dólares, a esta práctica se suma la coima que reciben los del COA en los puestos fronterizos. Con este panorama la Aduana es incapaz de agarrar al toro por las astas y poner cascabel al gato a personas inescrupulosas que drenan los ingresos económicos del país.
(*) Es periodista
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.