OJO AL CHARQUE - Los riesgos para la Obra Maestra Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad
Un conflicto poco abordado y latente
12 ene 2012
Por: Iver Pereira Vásquez
Ya pasó la Navidad y el Año Nuevo 2012 y nuestras mentes se van a concentrar con mayor intensidad día que pasa, en el Carnaval de Oruro, lo poco o lo mucho que haremos será en función a este grandioso acontecimiento humano, declarado por la Unesco como la “Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad”.
El conjunto de la comunidad, con distintos intereses y según ocupen sus roles se mueven en torno a estos, por ejemplo los que bailan en los 48 conjuntos de cultura mestiza, se concentrarán en los preparativos para luego bailar, los organizadores (Alcaldía Municipal, ACFO y Comité de Etnografía y Folklore) en organizar, los comerciantes en comercializar todo tipo de productos propios del Carnaval, los bordadores, en tener listo toda la batería artesanal de trajes para el éxito en la presentación, - que hace la diferencia al anterior año-, la Policía en brindar seguridad ciudadana, los médicos en evitar que existan muertos en esos días donde se divide en dos, la ciudad de Oruro, - claro que el derecho a la vida es más importante que el propio Carnaval - y los consumidores -ciudadan@s plurinacionales- de los bienes y servicios en forjar aún más atractivo la misma.
Todo parece hasta ahí un éxito, máxime aún cuando el Gobierno Municipal, en el ámbito de sus competencias viene planificando la venta de graderías y preservar aquello que fue declarado zonas culturales de Oruro, entiendo que sólo será por el Carnaval -claro que aquella declaratoria es parcial, cuando todo puede ser una oportunidad para desarrollar la cultura-, ojalá el Servicio Departamental de Salud en coordinación con los organizadores del Carnaval, también nos presenten un plan de contingencia de atención inmediata en todos los centros de salud de la ciudad, por ejemplo que los enfermos de la zona Norte sin derecho a seguros, lleguen oportuna y prontamente al Hospital General o los que radican en la zona Sud tengan la misma posibilidad de ser atendidos en los seguros, de ahí nuestra mirada al Carnaval de Oruro, es centrada a lo cultural/folklórico, cuando en ella realmente existen muchos otros acontecimientos invisibles o que se invisibilizan.
Esta maravilla universal e intangible, solo tendría éxito local, si no participarán otros actores importantes, como los medios masivos de comunicación, pero sería un rotundo fracaso si solo se baila en silencio y con silbidos o “silbadores” –como sucedió en el ultimo convite del 2011-, convertir la majestuosa entrada del sábado de Carnaval en sólo peregrinación, sería un grave daño al Patrimonio y a todos, por una acción política de todos los actores involucrados, la lógica es que todos pierden, es decir es una derrota absolutamente para todos -quizá culturalmente sería un paso en el avance en la descolonización, porque ya no se bailará la cultura centenaria y solo se peregrinará, la diferencia es que aún a la Virgen del Socavón y no al “Dios Sol”, y la atracción para todos sería la Anata Andina, tan hermoso como la propia entrada del Sábado de Carnaval y desnaturalizada por sus propios creadores la Fsutco – ya que en ella se participa por prebenda y no por fe.
Luego de más de cinco años de pugna, la disputa entre las bandas y los organizadores del Carnaval, va escalando y los discursos de ambos lados le ponen más leña al fuego, con grave riesgo para el Patrimonio de la Humanidad, ¿Qué intereses están en juego en realidad detrás de dos posiciones irreconciliables hasta hoy?, unos que creen que la Ley 602 es inmutable y que esta debe ser entendida como los 10 mandamientos como las figuras solidificadas en el Tiahuanaco, pues debemos entender que la “Las leyes reflejan construcciones sociales y de correlación de fuerzas en un momento histórico determinado. La ley es en esencia un proceso ideológico, político y de consecuencias distributivas y que detrás de toda ley existe en última instancia una decisión política” (David Kennedy). Desde que se ha promulgado la ley Nº 602, la realidad se ha transformado, las máscaras de la diablada como los instrumentos musicales y los otros que creen que deben imponer, bajo imposturas sin consultar una modificación a la ley a los otros actores.
Entiendo que el fundamento de fondo de la ley Nº 602 se refiere a la Organización y Programación del Carnaval de Oruro, cada uno en sus competencias, no refiere a la forma de distribución de la riqueza que genera el carnaval, sino a la forma de distribución de competencias, y ahí perfectamente esta organización podría discutir el precio máximo para la contratación de una banda de música, por ejemplo.
Todo conflicto es una oportunidad para transformar la realizad y creo que el debate sobre la petrificación o no de la Ley Nº 602 es una oportunidad para ella.
(*) Abogado
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.