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Sábado 15 de octubre de 2011

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Revista Tu Espacio

El psicólogo responde

15 oct 2011

Fuente: LA PATRIA

Por: Carolina I. Mena Medina - Psicóloga – exclusivo para Tu espacio

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Licenciada

Mi madre es alcohólica, tengo dos hermanos varones, yo soy la del medio.

Coincidimos con mis hermanos que mi mamá no debería tener esta actitud, pues nos hace sentir mal y también nos hace quedar mal.

Yo quisiera poder ayudarla pero, ella no quiere hablar del asunto con ninguno de nosotros.

Yo sé que ella se da cuenta de su error, pero ¿cómo hacemos, o cómo hago para que busque ayuda profesional?

Amiga:

Si tú te sientes o estás más cerca de tu madre, conversa con ella cuando tenga la conciencia lúcida para hacerlo.

Entabla una conversación seria, en la que incluso podrías involucrar a tus hermanos para persuadirla a que reciba ayuda profesional.

Es necesario que en su plática hagan saber a tu mamá cuánto la aman, cuánta falta les hace y cuánto necesitan de ella. Es fundamental no hacerle sentir culpable, sino que ella es importante para todos ustedes.

Para una persona alcohólica es muy difícil reconocer, dependiendo del grado de alcoholismo que tenga, que necesita una intervención.

De hecho, el primer paso deberá ser que el enfermo reconozca que es víctima de la enfermedad y decida buscar ayuda.

Es por eso, que todos los familiares deben estar comprometidos con el cambio y no solo “exigir” a la persona afectada que cambie su actitud.

El compromiso de cambio es para todos. Es en este caso que todos participen de una terapia familiar y lograr que toda ayuda tenga resultados.

Es preciso caer en cuenta que este cambio será un proceso largo y todos deben ser pacientes ante cada etapa de recuperación y depuración que se dé.

Las recaídas son frecuentes, pero si existe la orientación y constancia para lograr este compromiso de cambio y restitución es posible que la persona logre cambiar cada vez más su restablecimiento. Hasta lograr su completa recuperación y no solamente psicológica, sino también física, afectiva, mental y espiritualmente.

El primer paso es importante, abrir la posibilidad de un cambio a través de la reflexión, el cariño y respeto hacia la persona afectada.

Consultorio: Sucre No. 886 esq. Washington

Telf. : 52-51326

psico_menaan@hotmail.com

Fuente: LA PATRIA
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