Comenzó octubre y el domingo 16 debe efectuarse las elecciones judiciales de acuerdo al cronograma establecido y según el informe de la máxima autoridad del Tribunal Supremo Electoral (TSE) al afirmar que más del 90 por ciento de avance en la estrategia electoral se cumplió pese a problemas que se han registrado recientemente.
Si bien los problemas han sido solucionados, el caso del Tribunal Electoral de Oruro con cinco vocales suspendidos por incumplimiento de obligaciones y la temporal interrupción de circulación en la vía de la marcha por la defensa del Tipnis donde debía entregarse material electoral, el resto del operativo marcha sin dificultades.
En las pasadas horas personal del TSE se dedicó a “socializar” las cartillas electorales entre la población de ciudades y comunidades hasta donde les permite la capacidad de movilización, por tiempo y materia, lo que significa que se avanza en la divulgación del sistema de votación que debe cumplir cada ciudadano boliviano con una papeleta que por primera vez se presenta al electorado con cerca de un centenar de candidatos ubicados en diferentes franjas y que de algún modo merecerán la atención ciudadana.
Los pasos importantes como la provisión de material electoral, la distribución de ánforas, la conformación de los jurados electorales y sus directivas respectivas, la capacitación de ese personal en todo el país son parte del operativo total eleccionario que se está cumpliendo a cabalidad, por tanto no hay dudas sobre el desarrollo total del cronograma para que los miles de bolivianos habilitados legalmente acudan a las urnas dentro de 15 días.
Sin embargo, en las últimas horas del mes que acaba de fenecer, septiembre, han surgido algunas voces disonantes en torno al proceso electoral, marcando un hecho preocupante que significaría disponer la postergación del acto electoral hasta una fecha próxima, que por los rumores políticos que surgieron se marcaría en el mes de diciembre.
Si bien la Ley del Régimen Electoral prevé la suspensión o la postergación de elecciones por causas especiales como fenómenos naturales, hechos sociales o circunstancias fortuitas, en el momento actual tales factores simplemente no existen, salvo el temor político a la respuesta ciudadana que podría expresarse en los votos del domingo 16, situación que como señalan los políticos de la oposición está quitando el sueño a los oficialistas.
En los hechos reales no hay motivo expreso para alterar el calendario de las elecciones judiciales, pues desde el TSE se ha confirmado que el proceso marcha de manera regular habiéndose salvado pequeños problemas que no ameritan mayor atención que pudiese alterar el proceso electoral.
El TSE como se define en la Carta Magna es un organismo que se ha convertido en el Cuarto Poder del Estado, por tanto sus decisiones son de carácter independiente y en ningún caso deberían responder ni siquiera a insinuaciones de los otros poderes, por tanto al no haber justificación expresa las elecciones del día 16 no deben suspenderse, ese es el criterio del soberano que ya no admitirá manoseos políticos con intereses sectarios.
Fuente: LA PATRIA
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