Madurez Espiritual

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

En el campo del esoterismo práctico, la madurez espiritual es el requisito indispensable para poder desarrollar la sabiduría y el amor en nuestro interior y edificar el templo interno para el Cristo Íntimo en nuestro corazón. La primera pregunta es: ¿Cómo podemos adquirir la tan necesaria madurez a nivel espiritual? La respuesta es: - Empezando por lo primero que es: -Descubrir que verdaderamente todos somos seres espirituales, al mismo tiempo que somos seres energéticos y físicos. El primer paso es encontrar en forma directa al espíritu residente en nuestro interior, a esa chispa divina que mora en nosotros y que es la causa y el origen de nuestra existencia. Pero ¿cómo la encontramos? Simplemente debemos animarnos a buscarla en las profundidades de nuestro universo interior. Ella está esperando por nosotros. El Maestro Jesús el Cristo nos exhorta: “Pedid y se os dará, Buscad y encontrareis, Llamad y se os abrirá”.

Empezamos a vivenciar que somos seres creadores y que nuestra vida es lo que nosotros creamos, cada instante con nuestros pensamientos, con nuestras emociones, con nuestras intenciones y con nuestro verbo. Nos transformamos en seres más respetuosos de los demás, porque comprendemos que la clave está en amarnos los unos a los otros, porque en el amor está la fuerza que nos hace crecer espiritualmente. Nos convertimos en seres más responsables de nuestros propios actos, tratando de expresar lo mejor de nosotros mismos, de instante en instante, porque descubrimos que la felicidad, la libertad y todo lo más elevado que anhelamos está en directa relación con lo que damos, con lo que sembramos. Cuanto más damos, más cosechamos, cuanto más servicio al prójimo efectuamos, más enriquecida se torna nuestra vida.

Se va desarrollando en nosotros la Fe consciente, que es la experiencia directa de lo real, que es la experiencia del espíritu residente en nosotros conectado con el espíritu universal de vida, la certeza inamovible de la presencia del espíritu en todo lo creado.

Comprendemos profundamente una de las enseñanzas más poderosas del maestro Jesús, que nos da la clave: “Buscad el reino de los Cielos y todo lo demás se os dará por añadidura”. Debemos encontrar el reino de los Cielos dentro de nuestro universo interior, para experimentarlo también en todo lo que nos rodea. Una vez que encontramos a Dios dentro de nosotros y le damos la oportunidad de que regente nuestras vidas, todo lo demás viene por añadidura.

Dejemos que el amor y la sabiduría, que son la expresión de Dios en nosotros guíen nuestras vidas, en armonía con la naturaleza y el cosmos, en perfecto equilibrio entre lo material, lo energético y lo espiritual, y todo lo demás vendrá como consecuencia legítima de nuestros actos, que cada vez se tornarán más conscientes, en perfecta resonancia con la sabiduría y luz del Eterno Padre Cósmico Común, en perfecto equilibrio con la infinita abundancia y poder creador de la Divina Madre Universal y en perfecto sincronismo con el misericordioso Amor y Poder regenerador del Hijo, el Cristo, que es el mediador, el camino, la verdad, el fuego que nos libera, el poder que nos transforma.

Fuente: LA PATRIA