Martes 09 de agosto de 2011
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Editorial y opiniones
Primera aproximación a un modelo de desarrollo para Bolivia
09 ago 2011
Por: Adhemar Ávalos Ortiz
El desarrollo es un concepto, pero también una actitud y una formalización práctica en su sentido esencial. Tiene que ver con la vida de las personas, con sus hábitos de consumo y su nivel de gestión de sus necesidades básicas y superfluas. No se refiere exclusivamente a temas económicos, como en un tiempo se creyó erradamente. El consumo no es su único referente. Se entrelaza, necesariamente con la educación, la cultura y otras cuestiones sociales en un abigarramiento complejo. Y la política lo define, a ese desarrollo integral, para bien o para mal.
Bolivia ha pasado por muchas situaciones en su no tan extensa vida republicana, más corta como estatalidad plurinacional y un tanto más larga en su periodo colonial, aunque con el nombre de Real Audiencia de Charcas. Su historia es rica en contenido, no obstante traumática en hechos. La colonia, y también todo el proceso anterior, ha heredado a Bolivia condiciones tremendamente contradictorias e injustas que rayan muchas veces en la barbarie y el ostracismo.
Los hechos anteriormente descritos han configurado un desarrollo desigual que ha afectado a la mayoría de la población y beneficiado a grupos elitistas que han vivido del excedente económico de manera parasitaria sin generar un medio de bienestar para la gente que decían gobernar.
