Donar sangre un acto por demás altruista

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A propósito del Día del Donante Voluntario de Sangre, celebrado el pasado 14 de junio, queremos hacer un reconocimiento a todas las personas que despojadas de todos los mitos y todos los prejuicios que se tiene al respecto realizan esta acción por demás altruista.

Buscando en el internet información sobre este tema, encontré una frase que creo resume lo que significa… “Donar sangre es donar vida” y es en base a esta premisa que realizo esta nota.

A muchos nos puede dar miedo por las supuestas consecuencias que trae el que nos saquen sangre, pero además el sólo pensar que quitan algo que nos pertenece ya nos da miedo.

Sin embargo lo que pretendemos es brindar alguna información que pueda servir de orientación para quienes aún tienen dudas al momento de decidirse a “donar vida”.

Representa el 7% del peso corporal: Aproximadamente 5 litros en una persona que pese 65 kilogramos.

Transporta el oxígeno desde los pulmones hasta las células y el anhídrido carbónico desde éstas hasta los pulmones.

Transporta sustancias nutritivas (glucosa, sales, agua...) provenientes de la digestión. Además recoge los residuos y desechos para ser eliminados. También protege al organismo contra las enfermedades y mantiene en equilibrio el agua del organismo y la temperatura corporal.

Donar sangre es un acto sencillo y rápido. Pero, la población en general, e incluso el personal sanitario, desconoce su trascendencia.

Pero preguntémonos ¿Qué ocurriría si los quirófanos o las salas de urgencias de un hospital no pudieran disponer de sangre para una transfusión a los enfermos que acuden en situación crítica y cuyas vidas peligran? Es mejor no imaginarlo; las consecuencias serían nefastas para la salud pública.

La donación de sangre, según dipusevilla.es, es importante porque es el “único medicamento” que no se puede fabricar ni comprar. Muchos enfermos requieren de transfusiones sanguíneas para recuperar o mejorar su salud.

Sin embargo existen algunas creencias sobre esto, por ejemplo que engorda, o adelgaza, que hace más espesa la sangre, provoca ataques, y otros que no están comprobados científicamente. En los 192 países que componen la Organización Mundial de la Salud, la donación de sangre es altruista y anónima, que es la más segura. Aunque en algunos países no desarrollados hay otras modalidades de donación que cada vez son menos frecuentes: en algunos casos, las intervenciones quirúrgicas se realizan cuando los familiares de los pacientes han donado para el enfermo; en otros lugares las donaciones son dirigidas y/o remuneradas para los familiares; también existe el donante de reposición, es decir, cuando un paciente consume un número determinado de hemoderivados, otros donantes deben reponer lo consumido.

El llamado Tercer Mundo también se encuentra en condiciones adversas respecto a la donación de sangre. El problema no es sólo el elevado índice de sida entre la población, por ejemplo en países africanos. El proceso de la donación de sangre es muy costoso (potentes aparatos en los laboratorios, personal técnico especializado, etc…), aunque los hemoderivados sean donados por donantes habituales.

Los países desarrollados deberán plantearse en el futuro la cooperación con estos países cuyas economías no pueden permitirse mantener bancos de sangre en condiciones mínimas de seguridad.

Nadie está libre de sufrir algún accidente o necesitar sangre por algún motivo de salud, sobre todo en nuestro país donde tenemos un gran número de accidentes de tránsito, que conllevan esta necesidad en muchos casos.

Además en algunos embarazos complicados, cuando las personas tienen alguna hemorragia interna que son las peores, úlceras estomacales y otros, son algunos factores que hacen que la gente requiera sangre, así que seamos solidarios, “hoy por ti mañana por mí”.

Fuente: LA PATRIA