Arte para cuidar el medio ambiente

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Silenciosamente, sacando tiempo al tiempo, entre alicates, tijeras, pegamentos, algo de cartones y los más importante, en medio de lo que para el común de las personas podría ser “basura” como son las latas vacías de cerveza, permanecieron sentados, parados y afanados los trabajadores de la empresa Envases de Aluminio Boliviano (Enalbo), durante algunos días postergando por algunos minutos el retorno a casa, pero, decididos a crear arte con sus manos y algo de creatividad; convirtiendo así la “basura”, en objetos graciosos y de cierta utilidad.

Ese fue el ambiente que se creó en dicha empresa, tras el lanzamiento de la convocatoria “Arte en lata”, a iniciativa de la responsable del área de medio ambiente Carla Villca, donde los obreros, administrativos, personal de seguridad y de limpieza se motivaron y dieron rienda suelta a la imaginación.

Más allá de ser un simple concurso, cada fabricante explicó las motivaciones que inspiraron su creación, pero todos expresaron preocupación por el cuidado del medio ambiente y confesaron haberse dado cuenta que esta forma de reciclar las latas de aluminio es una opción coqueta, original, económica y distractiva de cuidar la mejor herencia que recibirán las futuras generaciones, como es un medio ambiente, menos contaminado.

A VER LA CREATIVIDAD

“Nos dimos cuenta que reutilizando las latas que fabricamos, podemos lanzar el mensaje hacia los consumidores de cerveza o refrescos, de convertir en arte aquello que después del gusto, pasa a ser nada más que basura”, decía uno de los concursantes al momento de explicar su creación.

Siendo la planta de trabajadores de la fábrica, en su mayoría varones, las creaciones también tuvieron un matiz masculino, pero las pocas mujeres que prestan servicios en el área de limpieza, también desafiaron al ingenio y crearon, réplicas de objetos y materiales, con los que casi a diario están en contacto. Es el caso de una mini y coqueta aspiradora, además de la maceta conteniendo un árbol, creaciones de Máxima Blanco, Neomí Mollo. “A diario nosotros limpiamos las plantitas del jardín, eso nos inspiró”, dijo una de las ellas al momento de explicar la motivación. Ellas merecieron una mención especial en la competencia.

Al tratarse de un concurso, había la necesidad de premiar algunos trabajos. El jurado integrado por el gerente de Enalbo, Rubén Sejas y el Jefe de Mantenimiento Alexei Gonzáles, además de invitados especiales valoraron la laboriosidad durante el proceso de fabricación, la motivación de sus autores y el contenido artesanal de las creaciones.

Con esos antecedentes, el trabajo merecedor del primer premio fue el escenario de rock, elaborado por el Grupo “C” de la sección logística, integrada por los trabajadores, Justo Mamani, Edwin Aguilar, Jhonny Minaya, Luis Rojas, Milton Beltrán, Oscar Choqueticlla, Marco Mamani, Jaime Navarro, Gabino Ayaviri, Vladimir Ayllón, Juan Carlos Ramos, Sandor Aquino, Alfredo Mauricio, Dennis Luizaga y Dennis Cabrera, quienes además fabricaron una motocicleta modelo Harley, también premiada con el segundo lugar.

Cuando a ellos les tocó explicar sus motivaciones, revelaron que en el grupo un trabajador, amante del rock, sugirió la idea que luego fue del agrado del resto y se pusieron “manos a las obra”.

En esta laboriosa creación, los integrantes de la banda de rock, están diseñados, cada uno en base a una lata de cerveza, además que para la caracterización, se fabricaron pequeñas réplicas de una trompeta, guitarra, la ruidosa batería, un violín y para el cantante un micrófono. Cada músico, en el escenario luce un look propio, con los pelos parados, encrespados o un corte al ras.

El ingenio de los obreros, se tradujo además en colocar baterías energéticas, o lo que se conoce tradicionalmente como pilas, para dar movimiento a objetos giratorio y con luces destellantes, sin descuidar además el cuidado de incorporar la publicidad en las paredes.

En el caso de la motocicleta, el diseño es en base a cortes precisos, para crear la réplica en la que los empalmes entre las piezas son casi imperceptibles, mientras que el tercer lugar fue para un montacargas muy peculiar, pues sus autores incluso crearon latas de cerveza en miniatura. La creatividad para esta obra corresponde a Marcelo Fuentes, Humberto Kille, Juan Carlos Kille, Juan Carlos Ajata, Juan Carlos Chambi, Miguel Tastaca, Leonardo Mollo, Juan Vargas, Enrique y Enrique García.

Una creación útil, resultó “Don Basurero”, fabricado a partir de cilindros que llegan hasta la empresa como conteniendo alguna la materia prima para fabricar los envases de aluminio, y por lo general al interior de ésta industria no se le daba mayor utilidad.

Los ejecutivos de Enalbo, felicitaron a su creador y decidieron fabricar réplicas del mismo e instalarlos en diferentes secciones de la planta, ubicada en el kilómetro 3.5 por la carretera hacia la población de Vinto.

Freddy Costas, que trabaja en la planta como parte del equipo de seguridad, se dedicó a fabricar originales trabajos, como un gigantesco alacrán, un carrito antiguo y una mezcladora de cemento, ésta última inspirada a partir de las obras de ampliación en la empresa, donde los albañiles utilizan dicha herramienta.

“Estamos perdiendo los valores y la educación, antes había más cuidado para botar la basura, ahora ya todo botamos donde sea y como sea, debemos recuperar los valores, para transmitir un buen ejemplo a las nuevas generaciones”, dijo al justificar sus obras.

CREACIONES

Esta es una forma de reciclar las latas de aluminio, con un poco de ingenio la mente del ser humano, puede crear simpáticos y útiles objetos, pues para el reciclado existen bastantes opciones, pero el principal rédito debe traducirse en el cuidado y preservación del medio ambiente.

Un envase de aluminio continúa siendo un residuo sólido después de 500 años. Cuatro de cada cinco latas de refresco que se fabrican en el mundo son de aluminio y sólo el 50% se recupera para su reciclaje Actualmente, siete de cada diez latas son de aluminio y tres de acero laminado.

Brasil el año 2007 recicló el 96,5% de las latas de aluminio utilizadas para bebidas, lo que se tradujo en 11.900 millones de latas durante el año pasado. Esa inmensa cantidad supone 160.600 toneladas de chatarra. El reciclaje generó para éste país 1.120 millones de dólares a través de la compra de envases usados y de otras actividades relacionadas.

Fuente: LA PATRIA