Restricciones de “nueva generación” contra las libertades ciudadanas
30 may 2011
Por: Fernando Valdivia Delgado
En palabras del Presidente y de algunos miembros de cúpula del “poder político” encontramos la decisión de no escuchar y mucho menos analizar la propuesta de “respetar la Constitución Política del Estado” y “adecuar a dicha Carta Magna, los términos de los artículos 82, 83 y 84” de la Ley del Régimen Electoral, que tanto periodistas como instituciones representativas de otros sectores, plantearon con el único objeto de defender las libertades ciudadanas en democracia y facilitar que los comicios para elegir autoridades judiciales se realicen en el marco estrictamente del respeto a la Constitución y las leyes.
El presidente del Estado Plurinacional había creado un escenario de confianza pública que se mantuvo vigente hasta hace una semana, al promover la idea de la modificación del artículo 82 de la citada Ley, a objeto de generar un ambiente de plenas garantías para el ejercicio de los derechos a la libertad de expresión, opinión, prensa e información, establecidas en la estructura constitucional. Es más, instituciones representativas del periodismo nacional, consideraron que modificar dicho artículo traería como lógica consecuencia la adecuación de los dos restantes.
En la “rutina parlamentaria”, sin embargo, no se ha entendido lo expresado por el mandatario o, definitivamente, se ha producido una contra orden con disposiciones de “nueva generación” que eviten generar un ámbito apropiado para una decisión de tanta trascendencia que facilite la implementación del proyecto político que podría revolucionar la política mundial en materia de administrar la justicia.
Es importante reconocer que dichas elecciones, de concretarse, se convertirán en la primera experiencia a nivel mundial y, si la “rutina parlamentaria” la carcome con sus devaneos, ese intento no fecundará como resultado el engendrar un sistema más idóneo, independiente e imparcial que garantice a la sociedad, una justicia con valores morales y éticos a toda prueba. Esperemos que esa sea la visión propuesta para dar el primer paso que estamos a punto avanzar, lo contrario promete un escenario estéril para nuestras intensiones.
Es importante recordar que el ejercicio de las libertades de expresión, opinión, de prensa e información, hacen a la vigencia plena de los derechos civiles y políticos que son parte de los “Derechos Fundamentalísimos” que rigen en la Constitución y, por lo tanto, tienen relación directa con cada uno de los once millones de habitantes de Bolivia. Los periodistas y las organizaciones que los representan, no buscan reivindicar para sí esos derechos, y, por el contrario, exigen que en beneficio de la colectividad, las actividades periodísticas en las futuras elecciones judiciales, se las realice invocando los principios que rigen la vida de los ciudadanos en el marco estrictamente constitucional.
Hay que admitir que los trabajadores de la información son parte de la vida cotidiana de la sociedad, pero, además, es necesario aclarar que en el ajetreo diario, los periodistas, no se dejan atrapar por la rutina que, en el mundo moderno se la define como el “hábito a renunciar a pensar”, en el marco del “menor esfuerzo” y que, por su naturaleza, impide a las personas, buscar nuevas ideas no enmarcadas en el refrán que, por inercia, repiten: “es preferible lo malo conocido, que lo bueno por conocer”.
Estas lecciones obligan que el trabajo de la prensa, con todas las sutilezas posibles, garantice un trabajo imparcial, independiente, fuertemente ligado a la verdad y éticamente responsable.
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.