La ética en el periodismo y la lucha contra el racismo

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Los periodistas en el ejercicio de sus funciones, como en cualquier otra profesión, tienen la obligación de respetar las normas éticas, disposición suficiente que ayuda a evitar incurrir en posibles mensajes con contenido racista.

Javier Darío Restrepo, colombiano, experto en ética periodística, director del Consultorio Ético de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) ante la consulta del economista Carlos Rodrigo Zapata, referida a la polémica generada en el país, a propósito de los artículos 16 y 23, de la Ley de Lucha contra el Racismo y toda forma de Discriminación, cuestionados por los periodistas; respondió con una frase tan simple, pero obviamente con un significado único indicando que existían dos formulaciones del problema planteados ante la consulta: “Utilizar la libertad de expresión como escudo para defender informaciones racistas y discriminatorias publicadas con total impunidad ó utilizar la condena del racismo y de la discriminación como argumento para limitar o desconocer la libertad de expresión”.

Él reflexiona indicando que si el conflicto entre gobierno y medios de comunicación ha de mostrarse en un nivel ético, son los medios los que están obligados a un tratamiento no racista, ni discriminador de la información, de modo que resulte superflua cualquiera legislación al respecto.

“La ética, en efecto, vuelve inútiles las leyes, por sustracción de materia. Pero si la propuesta ética no encuentra acogida en los medios, el gobierno debe aplicar las leyes; porque cuando no hay ética se debe acudir a las leyes que defienden el bien común”, sostuvo Restrepo ante la consulta.

En el coloquio cibernético entre Restrepo y Carlos Rodrigo Zapata, éste último rescatando las frases del colombiano reflexionó de la siguiente manera: “La ética, en efecto, vuelve inútiles las leyes, por sustracción de materia. Pero si la propuesta ética no encuentra acogida en los medios, el gobierno debe aplicar las leyes; porque cuando no hay ética se debe acudir a las leyes que defienden el bien común”.

DOCUMENTACIÓN

Existen afinidades y discrepancias entre lo legal y lo moral. Por una parte, tanto la ley como la moralidad se ocupan de imponer ciertas normas de conducta sin las cuales difícilmente podría sobrevivir la humanidad. Tanto las normas morales, como las legales imponen obligaciones o crean el sentimiento de obligación en un sentido que difiere notoriamente del sentimiento de obligatoriedad compulsiva con que son obedecidas las leyes dadas por alguien que nos apunta con pistola, describe el análisis de Restrepo.

Tanto las normas morales como las legales crean obligación a causa de existe una fuerte presión social para su cumplimiento y debido a que las obligaciones y deberes que conllevan, implican sacrificios o renuncias particulares.

RESPONSABILIDAD

Y REFLEXIÓN

En diciembre de 2010, a la par que se promulgaba la Ley de Lucha contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación, en La Paz, se desarrolló el Foro sobre Libertad de Expresión y Ética Periodística y al momento de abordar el tema de la responsabilidad de la ética en el periodismo con participación del periodista chileno Abraham Santibáñez, se dejó establecido que para los estudiosos, del periodismo, la ética periodística y la libertad de expresión, está claro que la ética y la ley son paralelas y van por carriles separados.

“Su implementación es distinta y por ello la mejor defensa de la libertad de expresión reside en un mínimo de disposiciones legales y un amplio respeto por la ética a través de la autorregulación”, destaca la revista “Libertad de Expresión y la Ley Contra el Racismo y la Discriminación”, editada sobre el particular por la Asociación Nacional de la Prensa.

En la ocasión se hizo una reflexión sobre la historia del periodismo y se refirieron a los alcances y las ventajas tecnológicas, fáciles de conseguir y la lucha por lograr la máxima independencia, como la aspiración de los profesionales en el mundo entero, tanto en dictadura como en democracia.

La primera lucha posibilita a los periodistas, la entrega de sus servicios, con información más variada y rápida, hasta en tiempo real, con imágenes y textos desde y hasta cualquier punto del planeta.

Lo segundo no siempre se percibe con la misma claridad. “Hay al parecer un lado oscuro en la sociedad como decía Fromm le tiene – miedo a la libertad. Son aquellos que acogen con vehemente entusiasmo, la idea de que si no se cautela bien, la libertad termina inevitablemente en libertinaje. La esencia de la democracia, sin embargo reside en el ejercicio sin trabas de la libertad de expresión”, puntualiza la publicación.

Se hizo en somero recuento de casos en que los periodistas, pagaron con sus vidas, la defensa de las libertades ciudadanas y su servicio a la sociedad.

John Peter Zeger, editor del Weekly Journal de Nueva York, que en 1735 fue acusado de difamación por haber criticado al gobernador nombrado por los británicos. Durante el juicio el abogado del acusado, reconoció que los artículos publicando críticas, eran de autoría de su defendido, pero alegó que no había una intención difamatoria y podía probar sus aseveraciones.

El juez, negó la posibilidad, pero se optó por la apelación en nombre de la “libertad de denunciar el poder arbitrario y de oponernos a él, hablando y escribiendo la verdad”. Y concluyó indicando que “cualquier hombre que prefiere la libertad a una vida en esclavitud, los bendecirá por frustrar el intento de la tiranía”. Luego Zenger fue absuelto.

La reflexión para todo ser humano y descartar las acciones racistas se resume en la frase: “racismo es ignorancia”.

Fuente: LA PATRIA