Miles de mexicanos celebran el séptimo título del Pumas
25 may 2011
Fuente: México, DF.- 24
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Tras el pitazo final el estadio olímpico de Ciudad Universitaria (CU) explotó de alegría la tarde de ayer, y fue desbordante de más de 40.000 aficionados, porque el Club Pumas había conseguido su séptimo título al derrotar 2 goles a 1 al equipo de Monarcas, en una final apasionante que tuvo como broche de oro un golazo de Javier Cortez.
Desde muy temprano 5 mil elementos de la Policía Federal, se hicieron cargo de la seguridad en CU, con el paso de las horas fueron llegando miles de hinchas del cuadro local.
Una hora antes del partido las tribunas estaban completamente colmadas, los cánticos de La Rebel, barra brava se hacían sentir en CU y calentaban más el ambiente de una tarde soleada en el Distrito Federal.
Uno de los momentos más emocionantes fue entonar el himno universitario. Los jugadores de Pumas formados, algunos mirando a la preferencia y otros a la general, levantan la mano derecha y con el puño apretado entonan el tradicional himno de la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam).
Las voces de los 11 jugadores son acompañadas por más de 40.000 personas y es un momento emotivo, para terminar el himno y escuchar el grito en todas las tribunas: “México, Pumas, Universidad, goya, goya, cachún cachún raaaa cachún cachún raaa, Universidad”.
Fue un partido intenso y muy disputado. Francisco Palencia, veterano jugador de los Pumas, de 38 años, a los 12 minutos del primer tiempo coloca un pase magistral para el ariete paraguayo Dante López, quien pisa el área grande y es derribado por el arquero de Monarcas, Federico Vilar.
El juez central marca la pena máxima, es Palencia quien con disparo con su diestra cambia el penal por gol.
Al minuto 24 un contragolpe de Monarcas termina en penal, cuando el portero Miguel “Pikolin” Palacios, derriba al delantero Miguel Sabha. El ecuatoriano Jimmy Lozano convierte y el partido cobra mayor emoción.
En la segunda parte, a los 79 minutos una genialidad del jugador Javier Cortez, que entra por la derecha evade a tres jugadores a dos de ellos les hace un caño y termina disparando a la portería y anota un hermoso gol.
Las tribunas se levantaron y gritaron el gol, para luego alentar y cantar: ¡Cómo no te voy a querer, cómo no te voy a querer, si mi corazón es azul y mi piel dorada, siempre te querré!
FESTEJOS
El final del partido fue el inicio para festejos en el DF, caravanas de vehículos se dirigieron al Ángel de la Independencia, donde comenzaron los festejos, cánticos, abrazos y las porras “pumistas” se hicieron sentir en la capital mexicana.
Los campeones luciendo el trofeo llegaron hasta el lugar a bordo de un bus y muy bien custodiados por la Policía.
Fue una jornada llena de fiesta que se prolongó hasta altas horas de la noche y en varias avenidas del centro histórico la afición de los Pumas festejaba la séptima corona.
Muchos hinchas recuerdan a Joaquín Botero y su paso por los Pumas. “Es el boliviano”, dicen algunos jóvenes.
Botero tuvo como compañeros a Leandro Augusto, Darío Verón e Israel Castro y sabe del cariño que le tiene La Rebel y los aficionados “pumistas”.
La barra brava de los Pumas es muy similar a la de San José, en cualquier parte de la república mexicana está presente y lleva a los estadios la alegría y fidelidad por sus colores.
Fuente: México, DF.- 24
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