Miercoles 04 de mayo de 2011

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Si un solo día disminuiría en los bolivianos la conciencia reivindicativa que tenemos por recuperar el Mar, se estaría pediendo la fe en ese derecho que tenemos y que en algún momento se cumplirá por efecto de la solidaridad y la justicia, por la razón que nos asiste y porque este mal no puede durar más.
No se puede pensar que en Bolivia hubiera disminuido o se habría perdido el civismo y la convicción patriótica que tenemos en función de recuperar el Mar que fue nuestro y que debería ser nuevamente parte de nuestra territorialidad, por eso parece que las políticas de reivindicación de ese derecho o las que apuntan a la recuperación de tierra con acceso al mar no pueden, no deben distorsionarse con duplicidad de eventos que en lugar de fortalecer la convicción de los bolivianos, crea confusiones y satura un ambiente realmente delicado, cuando además confluyen otros problemas que por sus condiciones políticas son igualmente parte de una incertidumbre que no debería ampliarse.
Está claro que hay un Día del Mar Boliviano, que además se produce en la fecha histórica en que la fuerza usurpadora arrebató en contienda injusta nuestro territorio. Esa es una significación especial que además cala profundamente en la conciencia de los chilenos, no así una repetición de hechos forzados por las circunstancias, pero sin el intrínseco valor cívico y patriótico que se inculcó desde hace años en la comunidad boliviana para recordar el Día del Mar Boliviano, en una sola fecha y con toda la fuerza de la convicción bolivianista que aflora en esa ocasión.
Fuente: LA PATRIA