La lectura y la escritura son la base para la formación de las personas

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El escritor César Verduguez Gómez, un cochabambino que escribe cuentos para todo público sostiene que la lectura y la escritura son la base para la formación de las personas, cualquiera sea su profesión.

Por eso, es que insta a niños, jóvenes y adultos a leer mucho para su propia formación puesto que, por ejemplo, un carpintero leído puede ser un buen dirigente de su gremio y podrá redactar una carta a las autoridades en vez de pedir el favor a sus hijos u otras personas.

El autor afirma que la lectura es un gusto especial que debe tener cada ser humano en cualquier sentido, sea a través de un libro, Internet, periódico, puesto que desde una noticia se puede llegar a escribir una obra.

Una de sus obras que titula “Antologías de Antologías”, se basa en la publicación de los mejores cuentos bolivianos que tuvo un gran éxito, por lo que editará una antología de cuentos escritos por bolivianas, un parámetro que sirvió para que otros escritores produzcan otras antologías como la de los diez mejores cuentos bolivianos.

Con sus investigaciones pudo conocer a quienes hicieron fábulas en Bolivia, como Adela Zamudio, un dato que es desconocido por la población, a la vez Nataniel Aguirre, uno de los pocos literatos que también se dedicó a la fábula en Bolivia.

Respecto a la literatura boliviana, dijo que es acogida en varios lugares, aunque existe temporadas que no reconocen el trabajo de los escritores, por eso dice que los novelistas, literatos se encuentran acostumbrados a la ingratitud de las personas.

A pesar de ello, sostiene que los escritores van mejorando sus obras para ponerlas a disposición de todo tipo de público y hace referencia que en la última temporada surgieron escritoras en cantidad y calidad que editan buenas obras como una revelación.

César Verduguez Gómez sostiene que la mirada de un niño le inspira para componer su obra literaria, porque el escritor es esencialmente espiritual que capta muchas cosas, desde las cosas más sencillas hasta las más complicadas que pueden ser un motivo para escribir como por ejemplo una flor, un basurero y ese tipo de cosas.

Otros factores que le motivan a escribir pueden ser captados a través de epopeyas como la lucha por el agua, un enfrentamiento suscitado hace algunos años en Cochabamba o una serie de movilizaciones como la de octubre negro o las movilizaciones de los mineros.

Son circunstancias que merecen ser plasmadas en papel y en escritura dependiendo de la inclinación de cada autor, como la poesía que prefiere cantar a las cosas bellas que tiene el mundo y otros que les gusta comentar las luchas en Bolivia, refiere.

Sobre la literatura boliviana narra que los mejores cuentos en Bolivia son una riqueza que se tiene como las del “Chueco” Céspedes con su cuento “El Pozo”, uno de los mejores cuentos que tiene Bolivia, que encabeza su libro Antología de Antologías.

El de Porfirio Díaz Machicao que es otra de las obras que se llama “Quirco en la raya del Horizonte”, un cuento que es uno de los mejores de Bolivia y que es una especie de patrimonio.

Sobre la creación de obras para todo tipo de público, manifestó que algunos autores pueden realizar cuentos, novelas y otras obras literarias para todo tipo de público al tener esa capacidad pero al mismo tiempo reconoce que no es hábil para escribir poesía, puesto que al haberlo intentado no logró plasmar sus ideas en este tipo de literatura.

“Habemos de todo en este mundo y, creo, que para ser autor se nace y, tanto autores antiguos como nuevos, sienten los mismos impulsos, tienen las mismas sensaciones y las mismas experiencias y lo que cambió fue el escenario, eso cambia el tipo de obra. Antes se escribía sobre las minas el campo y ahora surge otra temática como la migración, el narcotráfico y otros que son problemas sociales”, explicó.

Escribió muchas obras entre las que resalta “Hay un grito en tu silencio”, que fue traducido en varios idiomas como el inglés, el francés, el croata, incluso en árabe, que fue su mayor satisfacción al conocer esta noticia.

Manifestó que editar un libro significa mucho esfuerzo, puesto que se debe pagar por el diagramado, las fotografías y una diversidad de trabajos que se realiza para mejorar la presentación del contenido, aunque este sacrificio es en vano, debido a la competencia desleal de los denominados libros “piratas” que son copias del original vendidos a la mitad o a menos precio.

Por estos antecedentes el autor de tantas obras manifestó que es deber de todos gustar de la lectura para lograr que continúen las fantasías tanto en niños, jóvenes y adultos.

Fuente: LA PATRIA