Jueves 31 de marzo de 2011
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En los próximos 20 años, el 60 por ciento de la población mundial estimada en 7.000 millones de personas, vivirá en las ciudades, provocando graves dificultades en el suministro de agua potable, según un informe de la agencia de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO),
Por lo que el crecimiento de la población urbana requiere de nuevos planes y enfoques para el suministro de agua para beber, lavar y cocinar los alimentos cuyo acceso para los más pobres se convierte en un nuevo desafío.
De acuerdo a estudios de la FAO, la mayor expansión de la población urbana se dará en el llamado mundo en desarrollo que exigirá más cantidad de alimentos los que son cada vez más caros.
De ahí que se plantea mejorar las prácticas agrícolas a través de la purificación de las aguas servidas de las ciudades para destinarlas al riego en la agricultura.
En nuestro medio estos vaticinios comienzan a concretarse a través de una mayor migración campo-ciudad y el mayor costo de los alimentos.
Fuente: LA PATRIA