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Uru Uru: Donde nace la luz y se espera el alba - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
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Sábado 05 de marzo de 2011

Portada Principal
Sábado 05 de marzo de 2011
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CARNAVAL DEL BICENTENARIO 2011
Pág 1 
Su construcción
El Santuario de la Virgen del Socavón
Pág 2 
Dios habló a nuestros padres
Pág 2 
Bienvenidos al Carnaval del Bicentenario de Oruro 2011
Pág 3 
Tiene sus raíces en la Saya
Gallarda demostración de fuerza y sensualidad de los Caporales
Pág 4 
Tiene sus raíces en la Saya.-
Gallarda demostración de fuerza y sensualidad de los Caporales
Pág 4 
Incas: Danza, historia y tradición
Pág 5 
El Phujllay: Danza de victoria y resistencia
Pág 6 
Danza autóctona nacida de una leyenda de la cultura aymara
La furia del dios Sol enamorado envió a los Wititis para hacerle justicia
Pág 7 
Suri Sicuri, personaje singular, magnífico y enigmático del Carnaval de Oruro
Pág 7 
“Diablada”, ícono importante del majestuoso carnaval de Oruro
Pág 8 
En la danza de la Morenada
Las matracas simulan el rechinar de cadenas en los pies de los esclavos
Pág 9 
Conjunto Tradicional Folklórico“Diablada Oruro” con fe a la Virgen del Socavón desde 1943
Pág 10 
“La Frater”, encanto y devoción en el Carnaval de Oruro
Pág 11 
Los “Mañazos”, protagonistas de la Gran Tradicional Auténtica “Diablada Oruro”
Pág 11 
La Diablada Ferroviaria, haciendo historia en el Carnaval de Oruro
Pág 12 
Desde 1960
La “Urus” marcando diferencia entre las Diabladas del Carnaval
Pág 12 
La danza de los “Potolos”, carisma y gracia al bailar
Pág 13 
Desde el Occidente orureño
La Tarqueada
Pág 13 
Danza de los “negritos”, pasaje histórico de la vida en la Colonia
Pág 14 
Danza que evolucionó con el tiempo
Kullawada: Vinculación a la actividad económica de hilanderos y tejedores
Pág 14 
Paisajes altiplánicos con pinceladas musicales
Kantus Sartañani, conjunto autóctono que acoge a jóvenes danzarines
Pág 15 
Demuestran grandeza de la milenaria cultura boliviana
Los Kallawayas, ágiles y ligeros curanderos andinos
Pág 15 
Los Tobas:
Raza altiva y soberbia, que posee un concepto muy arraigado de libertad
Pág 16 
Un verdadero don de Dios
Manos mágicas visten al Carnaval de Oruro
Pág 17 
Ancestral fuerza y hombría de un ritual prehispánico reflejado en danza…el Tinku
Pág 18 
Hace más de 40 siglos
La llamerada, danza ceremonial cuyo origen data de la época pre agrícola
Pág 19 
Danza altiplánica basada en el viento
Los Zampoñeros
Pág 20 
Danzas estilizadas representan trabajo ágil y pastoreo en el altiplano
Pág 21 
Doctorcitos, elegancia y distinción desde la mina Itos
Pág 22 
Ritualidad y devoción minera en la “Ch’alla” al Tío de la Mina
Pág 22 
El Chiru Chiru y el Nina Nina nos dan a conocer a su protectora, la Virgen del Socavón
Pág 23 
Una tradición ancestral
Convite es compartir
Pág 24 
Leyenda que dio origen al Carnaval
Las Cuatro Plagas
Pág 26 
El motivo: La fe a la Virgen del Socavón
Origen del antaño Carnaval de Oruro
Pág 27 
Los músicos: Un fenómeno social
Melodías de trompetas, bajos, bombos y tambores dan vida al Carnaval de Oruro
Pág 28 
Basado en el “Auto Sacramental” de la Biblia
El relato de La Diablada: La lucha del bien contra el mal
Pág 29 
Con la participación de cientos de niños
El Corso o Carnaval Infantil asimila la devoción a la Virgen del Socavón
Pág 30 
Una singular danza llena de sátira
Waka tokoris, parodia de las corridas de toros ibéricas
Pág 30 
La tradición de un pueblo en la gastronomía
Pág 31 
Reliquias testifican grandiosidad del Carnaval consagrado como “Obra Maestra”
Pág 33 
Riquezas de un pueblo de esclavos reflejadas en cargamentos de plata
Pág 34 
ROMANCE DE LOS FASTOS ORUREÑOS
Pág 35 
Fragmentos del Carnaval de Oruro
Pág 35 
Lo real maravilloso del Carnaval de Oruro
Pág 36 
DEL DIOS ITWU A TÍO DE LA MINA
Pág 37 
La Mascarada del CAN era todo un acontecimiento del Carnaval
Pág 38 
Diálogo de Carnaval
Pág 39 
Los cuatro días en que Oruro se hace único por su Carnaval
Pág 40 
En formatos de 8, 16 y 35 milímetros
Películas que documentaron el Carnaval de Oruro
Pág 41 
Festejo y carácter precolonial del carnaval de Oruro
Pág 42 
Uru Uru: Donde nace la luz y se espera el alba
Pág 43 
La mayordomía en el Socavón
Pág 44 
La Virgen del Socavón y los ancestros
Pág 45 
Alcance de los aspectos legales del Carnaval de Oruro
Pág 46 
Del ritmo afro-boliviano de Saya a la danza estilizada de los Caporales
Pág 47 
Bolivia es una muestra polifacética de cultura y carnaval
Pág 48 
Carnaval de Oruro

Uru Uru: Donde nace la luz y se espera el alba

05 mar 2011

Fuente: LA PATRIA

Por: Ruth Carol Rocha Grimoldi - Antropóloga

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Varios escritos nos recuerdan que el día domingo de Carnaval, a las cuatro o cinco de la madrugada, los componentes de varios conjuntos se reunían para dirigirse a la capilla del Socavón para el saludo “al alba”, que consistía principalmente en ofrecer oraciones en torno a las fogatas, encendidas para combatir el frío y a veces la lluvia, alternando con melodías interpretadas por las bandas. Posteriormente se bajaba a la casa de fiesta, donde esperaba el qalapari o lagua, que era compartido entre todos, antes de volver a vestir los trajes, para por la tarde participar en el corso carnavalero.

Con el tiempo, se incrementó el comercio de bebidas, ya no sólo de los tradicionales ponches, sino sobretodo de cerveza y ron con cola, que parece ser la bebida preferida de los grupos de jóvenes hombres y mujeres que se apropian de la plaza y de todo espacio posible. Actualmente, es casi imposible diferenciar y participar del “alba”, por los numerosos conjuntos que continúan la entrada hasta más de las ocho de la mañana, y que irrumpen en el momento de oración. ¿Será que hemos perdido definitivamente esta expresión que era única en el contexto de la peregrinación?

Se ha señalado que el “carnaval” como festividad es de data prehispánica, y por ende tiene algunas de sus características: “En las proximidades del actual templo del Socavón ocurrían ciertos juegos, cuya particularidad se fundaba en ritos ancestrales. A mediados de 1609 se practicaba el juego del ayllu, que convocaba a gran cantidad de gente”. Tomando en cuenta el uso del liwi o boleadora de tres puntas, nos referimos a la presencia de antiguas poblaciones lacustres (collas, urus o choquelas) en las serranías de Oruro, que las usaban y usan para la caza. Por otra parte, si se tiene en cuenta que ciertos juegos eran utilizados para definir el acceso a la tierra, estamos hablando también de un encuentro entre componentes de distintos bandos o parcialidades en una suerte de tinku o “competencia” entre iguales, que es tan propio de la época de carnaval. Competencia que trasladada a otro ámbito, se reproducía en el contrapunteo de las bandas. Aquellas cuya música se sobreponía a las demás, eran las mejores y las más reconocidas, así como sucede en las fiestas patronales y en los días de carnaval o de anata, en los que se enfrentan a través de la música las bandas orureñas.

Otro elemento central del alba, perdido hoy, es el momento de oración y recogimiento en el preciso momento que va ha salir el sol o estrella de la mañana. En muchísimos lugares al igual que en Oruro (Uru Uru, donde nace la luz), la población sube a los calvarios o marka qullus, a recibir al sol y su energía. Su llegada reaviva la vida y espanta la oscuridad, el frío de la noche y el amanecer. Espanta también las penas y preocupaciones que son compartidas por cada uno o una alrededor del fuego; con la comunidad presente, con la Mamita o el Tatitu Dius Auki. Esas lágrimas y sollozos, que desgarran el dolor y la impotencia de cada día, son la ofrenda y el perdón. Mientras la luz y el sol van creciendo, abarcando todo. Se ven las formas, los colores y se escucha la vida; en la voz de los pajaritos, que contagian la alegría del nuevo día y obligan a sonreír, reír y cantar, mientras se vuelve… ¿No hemos perdido acaso este momento de oración? ¿No es necesario acaso humanizarnos y dejarnos traspasar por lo trascendental? ¿Acaso la fiesta no es un momento para volver a empezar?

Oruro no debiera perder esta expresión tan única y tan enriquecedora. Tal vez no sería necesario tanto alcohol en las calles. Esperemos entonces, el alba.

Fuente: LA PATRIA
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