Películas que documentaron el Carnaval de Oruro

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Los movimientos parecían más lentos. Los diablos giraban y extendían los brazos mientras una indescifrable sonrisa se dibujaba en las clásicas caretas de los años cincuenta. No era ni un minuto y treinta segundos, y película logró estremecernos. Era la Diablada de los fraternos que se proyectaba en blanco y negro de una película de 8 milímetros de 1951.

¿Cuántas películas tendrá el Carnaval de Oruro? Quizás la pregunta sea muy difícil de responder si incluimos a los muchísimos aficionados que tomaron una cámara de 8 hasta 16 milímetros para documentar esta expresión de impresionantes relieves. Cuántos turistas extranjeros desde la década de los años cuarenta registraron nuestro Carnaval en cámaras como Phate Baby o Kodak.

A Oruro llegó la invención de los hermanos Lumiere en 1899. El periódico la Evolución registra en una crónica las diferentes sesiones organizadas para la proyección pública de algunas escenas y películas de gran expectativa.

Pero el orureño no solamente se dedicaba a tomar sus propias fotografías, merced al avance y los nuevos productos fotográficos. Se tiene evidencia que en la década de los años veinte se importaron algunos equipos de cine como las cámaras “Pathe Baby” con su proyectora de bombilla eléctrica y funcionamiento manual de industria francesa. Era un equipo costoso que era anunciado en las revistas como Caras y Caretas y El Hogar de Buenos Aires, Argentina.

Entre algunos documentos consta la solicitud que hizo el Ateneo Cultural de Oruro para adquirir en 1925, todo este equipo de filmación para diferentes actividades culturales. Sensiblemente entre los documentos de uno de los socios de esta entidad, no se verifica si efectivamente llegaron estos equipos y de ser así qué tipo de trabajos realizaron.

Es muy probable que muchos aficionados al cine en nuestra ciudad, hayan adquirido estos aparatos cinematográficos para llevar a cabo filmaciones domésticas y familiares; y entre ellos posiblemente las actividades sociales como el Carnaval de Oruro. Se tienen a la fecha algunas películas de Pathe Baby con tomas de Arenales y Corpus Christie de 1932. (1)

Después de la Guerra del Chaco, una vez superados los traumas y las dificultades de una postguerra, Oruro retomó sus actividades del Carnaval; pero el Carnaval ya no adquirió el protagonismo de las comparsas y grupos de disfrazados al estilo europeo. La mentalidad de la generación del Chaco, orientó su mirada a la revalorización de las costumbres y tradiciones populares. Los escritores y periodistas comenzaron a asignar mayor espacio en los periódicos y algunas revistas esporádicas de Oruro y del país. Asimismo, la gente se interesó en tomar fotografías del Carnaval de Oruro; y a registrar esta festividad, en las primeras películas de 8 milímetros que llegaron a la Casa Kavlin.

COLECCIÓN FAMILIA FUENTES - DUVRAKSIC

Uno de los primeros testimonios fehacientes del registro fílmico del Carnaval de Oruro, corresponde a la colección de 12 rollos de película de 8 milímetros pertenecientes a la familia Fuentes- Duvraksic. (2). Se trata de un valioso fondo en cuyas películas se documentó el Carnaval de Oruro en la demostración folklórica que se realizaba al interior del Patio de la Prefectura; el Corso Infantil, el Sábado de Peregrinación y varias otras escenas. Las filmaciones datan de la década de los años cuarenta y cincuenta; y alternan escenas del aeropuerto “Juan Mendoza”, juegos populares, corrida de toros y demostraciones gimnásticas de nuestra ciudad.

COLECCIÓN EMILIO TELLERÍA

De esta colección conocimos en 1993 aquella memorable filmación de un minuto y medio de la Fraternidad Artística y Cultural La Diablada. Según algunos informantes, don Emilio Tellería que trabajaba en la Casa Grace realizó más de 10 filmaciones de la Diablada de los fraternos como de las actividades del Carnaval de Oruro.

COLECCIÓN HUGO CANEDO ARIAS

Quizás una de las más valiosas. Hugo Canedo Arias también socio de la Fraternidad, fue un profesional de la fotografía. Logró extraordinarias imágenes del Carnaval de Oruro en toda la década de los años cincuenta y sesenta. Pero además de fotografías, logró filmaciones en 8 milímetros desde 1959 hasta 1968.

DOCUMENTAL DE JOSÉ HINOJOSA

Uno de los documentales más valiosos del Carnaval de Oruro en formato de 16 milímetros corresponde al trabajo del cineasta José Hinojosa. Se trata de una película sin sonido pero presentada con carteles y leyendas para mostrar toda la majestuosidad del Carnaval de Oruro de 1966 y 1967. En este trabajo se advierten las calles de Oruro, las minas de San José y principalmente la presentación de casi todos los conjuntos del Carnaval.

PELÍCULAS Y DOCUMENTALES DE VICENTE GONZÁLES-ARAMAYO

Vicente Gonzáles-Aramayo Zuleta el primer cineasta orureño profesionalmente hablando. Ha desarrollado más de veinte películas en diferentes formatos, pero principalmente en súper 8 milímetros. Sus películas refieren a las leyendas, costumbres e historias de nuestra ciudad. De nuestro Carnaval tiene, en su haber, la primera película propiamente dicha, con actores, efectos y un guión cinematográfico. Esta película se denomina “Sortilegios del Carnaval” y constituye una verdadera joya de nuestro patrimonio cultural, no solamente por el registro del Carnaval de 1979 sino por el argumento y el tratamiento de un cine profesional.

Don Vicente Gonzáles-Aramayo también ha logrado documentar el Carnaval de Oruro desde 1962 en una serie de películas en formato de 8 y súper 8 milímetros.

DOCUMENTAL MAURICE PERRIMOND

Allá por 1973 un grupo de cineastas franceses llegó a nuestra ciudad para rodar un documental que destaca por su interpretación antropológica del Carnaval de Oruro. Maurice Perrimond, quien figura como el director de este documental, desarrolla todo el significado de la fiesta, desde los artesanos, vendedores hasta llegar a la presentación de los conjuntos por las calles de Oruro. Este documental parece haber recibido una censura por las autoridades de aquel tiempo, por el hecho de este trabajo mostraba una persona en estado de ebriedad.

LA PELÍCULA ESITO SERIA

Esta película de producción argentina, de la directora Julia Vargas, se constituye en uno de los más recientes aportes para el Carnaval de Oruro. Este film no solo realiza un registro del Carnaval sino presenta un argumento interesante para contar las historias de esta festividad consagrada a la Virgen del Socavón. Sin duda un aporte significativo que aún convoca a muchos visitantes para nuestro Carnaval.

Hasta acá hemos desarrollado una pretenciosa relación que aún debe enriquecerse. No consignamos, acá, al registro del Carnaval de Oruro en videos u otros soportes, porque consideramos que eso merece otra investigación desde la aparición del Betamax, VHs y Dvds, cuyos formatos reemplazaron definitivamente a las antiguas películas elaboradas con celuloide.

(1) En la biblioteca del Dr. Josermo Murillo Vacareza aún se conservan estos negativos, los mismos que al parecer no han sido revelados para llegar al positivo o negativo de una película. Sin embargo, del Carnaval de Oruro se cuenta con filmaciones aficionadas del Carnaval de Oruro de 1972.

(2) LA PATRIA, 16 de junio de 2006. Películas de familia Yugoeslava revelan características del Carnaval de 1945.

Fuente: LA PATRIA