Raza altiva y soberbia, que posee un concepto muy arraigado de libertad

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El Carnaval de Oruro, declarado como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), es una simbiosis de las diferentes culturas de nuestro país, que representadas a través de 18 especialidades de danza muestran, año tras año, la enorme riqueza de tradiciones y costumbres que encierra la cultura Boliviana.

Entre las danzas que permiten esa demostración de devoción y fe, el Sábado de Peregrinación hacia el santuario de la Virgen de la Candelaria, se encuentra la danza de los Tobas, que con alegría, colorido y gran destreza, los danzarines llegan a los pies de la Patrona de los Mineros.

Otra de las teorías, enmarca a los primeros pobladores que irrumpieron en las zonas selváticas del oriente boliviano, quienes ejecutaban pasos acrobáticos representando la caza de animales silvestres, aunque también se afirma que los tobas habrían sido traídos al Collasuyo por el inca Túpac Yupanqui.

El nombre de los “tobas” tiene su origen en el Chaco tarijeño y significa la “integración de los pueblos”. Pero la misma danza, en sí, se originó en las etnias de la selva amazónica, donde los hombres y mujeres con trajes y máscaras de guerreros, representaban a las aves sabias de la selva como lechuzas, búhos y otros.

Historiadores y escritores del folklore coinciden en que la danza del toba, proviene del Oriente y Chaco Boliviano por el uso de plumas en el vestuario, lanzas, collares de semillas y en su coreografía se caracterizan los movimientos ágiles que simbolizan el transplante del que fue objeto, del Oriente al Altiplano, en la época del Incario, además con movimientos y saltos majestuosos, que expresan la cacería del puma.

Los tobas son una raza altiva y soberbia, que posee un concepto muy arraigado de su libertad, al igual que muchos grupos selváticos existentes en Bolivia.

El clima tropical con dos estaciones definidas: Lluviosa y seca; el ámbito majestuoso de los grandes bosques, bañados por innumerables lagunas, caudalosos ríos engendraron características similares entre las numerosas tribus. Como su economía que es fundamentalmente recolectora y agrícola.

El paso de descanso, es el seguimiento sigiloso a la presa que se encuentra herida y fácil de ser acorralada, los saltos expresan júbilo por el logro de su cometido al someter a la fiera y herirla gravemente clavando su lanza.Existen autores que manifiestan que los tobas fueron tribus que ni los collas ni mucho menos los españoles pudieron doblegar o conquistar, lo que les permitió conservar sus expresiones culturales hasta nuestros días.Los tobas de esta manera, al conservar sus ritos y costumbres, no olvidaron sus prácticas ceremoniales y con el tiempo pusieron a su danza el sello de la tradicionalidad dentro del Carnaval de Oruro.

La danza de los tobas surge a inicios del siglo XX, en el Carnaval de Oruro, cuando algunos vecinos del gremio denominado “carreritos” de la Avenida Boulevard hoy conocida como 6 de Agosto, deciden el 14 de enero de 1917 formar el primer grupo de tobas con el nombre de “Tobas de la Zona Sud” e incorporar una danza más al Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.

Sin embargo, existe un registro anterior acerca de la fundación de otro grupo de tobas, que sería el 1 de julio de 1911, los mismos que se denominaron “Tobas Central”, y el último conjunto de tobas se creó el 6 de marzo de 1976, con el nombre de “Tobas Uru Uru”.

Estos tres conjuntos a través de sus dirigentes y danzarines realizaron investigaciones en el Sur, Este y Norte bolivianos, para recopilar la mayor cantidad de etnias que existen en Bolivia, las mismas que sobrepasan de las 125.

VESTIMENTA Y COREOGRAFÍA

Acerca de la vestimenta rescatamos una entrevista bastante interesante, que realizó Rodrigo León a uno de los danzarines de la época en que surgieron cambios allá por los años 70, Fernando Dehne Franco, quien relata que las diferentes adaptaciones sí se tomaron de la cultura norteamericana.

Dehne comenta que las ideas surgieron de un grupo de jóvenes que quisieron innovar y hacer de los tobas una danza más atrayente, pues hasta entonces la integraban pocas personas y de muy escasos recursos.

Los tobas usan falda, ponchillo, turbante largo con plumas en las puñeras y tobilleras. Los cambas que antes desfilaban casi desnudos, ahora se cubren con un pantalón y un poncho con flecaduras en ambas prendas. Y los chipayas portan ponchos y pantalón ligeramente modificados del que usan a diario.

Lo más costoso del disfraz es el turbante, las puñeras y tobilleras. Las plumas, si son de parihuana cuestan menos que del avestruz.Un turbante se hace con las plumas de 20 parihuanas, y una tobillera o puñera, con 10 plumas cada una, lo que hace subir el valor del traje a más de cinco mil bolivianos.La coreografía se caracteriza por figuras y demostraciones en círculo, donde se observa la compactación del bloque, pasos bautizados con los nombres de Bolívar, Paso de la calle, Matillo, Chucu-Chucu, y otros que consisten en saltos atléticos de forma sincronizada y que requieren preparación física, movimientos de elegancia varonil y sensualidad femenina, brindando un espectáculo contagiante que se promociona y provoca admiración por los espectadores del Carnaval de Oruro.En la actualidad existen tres conjuntos de la danza del toba, los Tobas Sud, la Fraternidad Tobas Central y el Conjunto Artístico Tobas Uru-Uru.TOBAS CENTRALLa fundación de este conjunto fue el 1 de Julio de 1911, por los hermanos Leocadio y Mateo Escalera Bravo, pero luego más de 50 años, en 1962 este conjunto se presenta institucionalmente en la peregrinación folklórica del sábado de Carnaval, y por doce años, hasta 1973, año en que deja de existir su presidente, Juan Pallas, por lo que en su memoria y por luto se ingresa nuevamente en receso.Luego de más de una década de luto, el 22 de diciembre de 1984, a iniciativa de René Pallas, hijo del difunto, por tercera vez, inician una nueva etapa de folklore y devoción.TOBAS ZONA SUD En 1916, se formó un grupo de 20 personas que dirigía Tomás Cáceres, integrado por su hijo Donato Cáceres, Hernán Quiroga, Alberto Ocampo y los carreritos, que eran los trabajadores de transporte de mano de esa época fueron los primeros danzarines de los Tobas de la Zona Sud.Con el pasar de los años se estilizó la música y la vestimenta, una de ellas fue el cambio de banda de pinquillos por otra de viento, poco a poco el ritmo contagioso y el paso ágil de los tobas llamó la atención de nuevos danzarines, quienes formaron nuevos bloques representando a las etnias originarias, la vestimenta fue mejorada y estilizada con llamativos adornos coloridos y máscaras con un ceño respingado y guerrero, desde ese entonces la danza de los Tobas fue modificada, pero sin perder la esencia originaria para su representación en el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.En 1976, se amplió el conjunto con dos grupos de cambas y de chunchos, los primeros representación neta del oriente boliviano y los segundos originarios del Chaco tarijeño con influencia del oriente boliviano, según algunos historiadores, la vestimenta de los chunchos incluyendo la chunchera es originaria de la región y no como muchas personas confunden frecuentemente con los apaches de Norteamérica e incluso algunos con los Pieles Rojas, luego de la reaparición de los tobas Sud, también se dio origen a otro conjunto de esta danza, que son los Tobas Uru-Uru, que fue fundado el 9 de Marzo de 1976.

Fuente: LA PATRIA