Jueves 03 de marzo de 2011

ver hoy





































































TU BENDICIÓN
Acallando del alma los dolores,
sola por el alud acompañado,
mis pálidos cantares, como flores
vengo a dejar en tu sepulcro helado.
De entre los vivos te arrancó la MUERTE
en un instante trágico…, Sombrío,
Sin embargo, el abismo de la muerte
no impide que me escuches, PAPITO ¡MÍO!
Cuando partiste, en nuestro hogar tranquilo
todo mudo quedó, todo sin vida,
pero tu imagen encontró un asilo:
mi pobre corazón, nunca te olvida.
Aún te contemplo con amor profundo;
aún te escucho, te adoro, sí, te adoro
Sola no estoy! Camina por el mundo
la sombra de tu espíritu, conmigo!
La desgracia llegó: sonó la hora.
Honda pena dejó en mi pecho abierto,
porque una oscura noche aterradora
te vi tendido ya... Muerto!
Pero, te sentí llegar! Mi mente absorta
caminar en la casa te sentía.
Verte no pude pero que importa
Con los ojos del alma, te veía!
Te acercaste: tus brazos me estrecharon
Tu mano me bendijo, dulcemente
Con ternura, tus labios estamparon
un beso de dolor, sobre mi frente!
Fuente: LA PATRIA