ONG pide al régimen chino que deje de maltratar a disidentes y familiares
13 feb 2011
Fuente: Pekín, 12 (EFE).-
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Grupos de derechos humanos exigieron hoy (ayer) al régimen chino que deje de acosar y maltratar a los familiares de disidentes tan famosos como el Nobel de la Paz encarcelado Liu Xiaobo o el abogado ciego Chen Guangcheng, que sufre detención domiciliaria ilegal desde septiembre.
Ayer mismo, Chen y su mujer fueron atacados por efectivos policiales tras conseguir filmar y publicar un vídeo de una hora sobre él la detención ilegal que sufre la familia desde que el abogado cumplió su condena en septiembre, una pena sufrida por denunciar los abortos forzados e ilegales en 7.000 familias de su provincia.
“Estamos horrorizados por el uso de la violencia”, señaló la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) en un comunicado. “Instamos a las autoridades chinas a que faciliten a Chen los servicios médicos que necesiten y que se abstengan de otro acto de violencia contra él y su familia”, prosigue el comunicado.
Además, RSF pide “la liberación inmediata de todos los activistas en favor de la libertad de expresión que se encuentran bajo arresto domiciliario de forma ilegal”. La ONG Human Rights in China (HRIC) exigió hoy al Gobierno que investigue el ataque contra Chen y su familia y pidió a la comunidad internacional que presione por lo que es “una violación fundamental del derecho de moverse libremente”
La ONG Chinese Human Rights Defenders (CHRD) expresó también su protesta por la paliza propinada a Chen y a su esposa, Yuan Weijing, en su domicilio de la provincia de Shandong, en el este de China.
“Creemos que la policía intentó castigar así a la familia por filmar y documentar el arresto ilegal que sufren desde hace cinco meses”, señala el comunicado de esta organización.
Este maltrato “forma parte de la persecución que el régimen ejerce sobre las esposas, hijos y otros familiares de los activistas en todo el país”, agrega este grupo humanitario con sede en Hong Kong.
Entre estas detenciones ilegales, destaca la de la poetisa y fotógrafa Liu Xia, esposa del Nobel Liu Xiaobo, que se encuentra recluida por las fuerzas de seguridad en el apartamento que el matrimonio tiene en Pekín, desde que el 8 de octubre se supo que su marido había obtenido el galardón sueco.
De la misma manera, Zeng Jinyan, la esposa del ecologista encarcelado Hu Jia, ha sido objeto del acoso y el control policial en los últimos años.
El acoso del régimen es de tal calibre que algunos de estos familiares se han visto obligados a exiliarse al extranjero, como sucedió con la mujer e hijos del abogado de derechos humanos desaparecido, Gao Zhisheng, o la del activista Guo Feixiong, que escaparon a Estados Unidos en 2009.
Tanto el abogado ciego Chen, como el ecologista Hu y el letrado Gao fueron también candidatos en 2010 al premio Nobel de la Paz por su destacada labor en materia de derechos humanos en su país.
El gobierno chino no tiene ninguna base legal para detener a Chen Guangcheng y su familia, o a Liu Xia, y también carece de base legal para acosar a Zeng Jinyan y al resto de familias de disidentes que sufren persecución de las autoridades, señaló Tanya Wang, subdirectora internacional de CHRD.
Esta organización añade una larga lista de otras familias de disidentes que sufren el mismo tipo de maltrato y acoso, como la del activista Qin Yongmin, la del independentista mongol Hada, el peticionario fallecido en extrañas circunstancias Duan Huimin, o el cristiano perseguido Fan Yafeng.
A pesar de ser la segunda potencia económica, China lidera las listas de infracciones de derechos humanos, y aunque la comunidad internacional ha presionado al país asiático durante años por estos conflictos, desde la crisis de 2008 la presión ha aminorado en favor de la compra de deuda estatal de los países occidentales.
Fuente: Pekín, 12 (EFE).-
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