Lunes 17 de enero de 2011
ver hoy
Siete años después de su primera participación en el Dakar, Nasser Al Attiyah consigue su consagración. Después de ser considerado mucho tiempo como un genio al volante incontrolable, el piloto qatarí logra ganar su primera carrera de rally raid en Buenos Aires. La más grande de todas.
“Es muy rápido”, decía de él en 2004 Marc Bartholomé para describir al discreto qatarí que tenía como misión copilotar en una primera participación el Dakar. Al final del rally, Nasser Al Attiyah conseguía, en su primer intento, un 10º puesto en la clasificación general y un 3º en la especial del Lago Rosa, al volante de un Mitsubishi “para clientes”, que no contaba con lo que hacía falta para medirse con los mejores. Los equipos oficiales se enteraron rápido de su dominio del volante.
Fuente: LA PATRIA