Legendario regimiento Colorados homenajeó a egregio comandante

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Honrar la memoria de nuestros héroes y pro-hombres, siempre será ineludible misión de las generaciones de todos los tiempos.

Dentro de este principio vital y ético, el Comando del Regimiento de Infantería “Colorados de Bolivia” Escolta Presidencial de La Paz, recientemente en el Panteón de Notables de esta capital, desarrolló significativo Homenaje Póstumo a la memoria del Primer Conductor de esa bizarra unidad militar Cnl. Ildefonzo Murguía Anze, de excepcional desempeño en la campaña del Alto de la Alianza en la infausta Guerra del Pacífico.

El Cnl. Murguía, orureño de nacimiento y de brillante e intachable trayectoria militar, pasó al templo de la inmortalidad defendiendo la heredad nacional de las fauces de los invasores.

Por ello y porque así manda la historia patria, un batallón del regimiento Colorados de Bolivia en aquella ceremonia, TRASLADÓ SIMBÓLICANMENTE los despojos del insigne militar orureño a la Unidad Escolta Presidencial de La Paz, que custodia la vida y acciones de los presidentes del País.

Junto a sus 200 soldados que arribaron expresamente de La Paz para el homenaje, el Comandante del Reg. Colorados de Bolivia, Tcnl. Gróver Rojas Ugarte, en el cementerio orureño pronunció meditada Oración Cívica ante los restos del egregio comandante, destacando:

“Al hombre, al soldado, al militar de honor, que elevó al cénit de los inmortales a los gloriosos Colorados de Bolivia. Hace más de un siglo mi general que ya partiste, hace más de un siglo que dejaste a los mortales para convertirte en la fuente de inspiración y guía de los Chaquetas Rojas”.

Rescatando un episodio capital de nuestra historia el Tcnl. Rojas Ugarte añadió:

“Mi General: estamos acá presentes los herederos de las gestas heroicas del Campo de la Alianza de 1880. Estamos acá presentes, los soldados que heredamos el honor de empuñar la espada de la victoria de los defensores de la Patria. Estamos acá presentes, los descendientes de los ocho soldados Colorados que fueron fusilados el 7 de agosto de 1881 en Potosí, los verdaderos héroes de Tacna”.

El Jefe Militar completó su sentida oración cívica afirmando:

“Somos los que marcamos tus pasos mi General. Somos los que hemos hecho de tu ejemplo nuestra forma de vivir, de tu caballerosidad nuestra forma de conducta, de tu bravura nuestra forma de pelear y de tu templanza nuestra fortaleza de espíritu. Somos los que reclamamos tu presencia en nuestro cuartel. Permítenos llevarte a casa, a la morada de los legendarios y heroicos Colorados de Bolivia, para que sea la luz que ilumine nuestro sendero, para que seas el norte de nuestras actividades y finalmente nuestra inspiración que vivifique nuestros espíritus… tus soldados que vestimos las Chaquetas Rojas nada más te decimos: HASTA LA PRÓXIMA MISIÓN MI GENERAL”.

Momento en que hendía el cielo orureño, la también inmortal “Llamada de Ordenanza de los Colorados”, arrancando emociones mil y lágrimas de los presentes, entre los que se encontraba el Gobernador del Departamento, la Alcaldesa de la ciudad, autoridades administrativas locales y el Comandante de la Segunda División del Ejército y todo su cuerpo de jefes y oficiales.

En una pequeña urna transportada en cureña militar, efectivos de la bizarra unidad trasladaron simbólicamente los despojos del Jefe del Alto de la Alianza, rindiéndole los máximos honores, al tiempo que se iniciaba una Parada Militar en su honor.

Muy bien por la iniciativa del comandante del Regimiento Colorados, que reavivó el espíritu cívico de la nacionalidad, lo que nos da pie para sugerir a las autoridades en funciones mandar erigir un monumento a tan digno patricio, máxime si es orureño de nacimiento.

A propósito de don Ildefonzo Murguía – en cuyo homenaje existe una calle y un colegio en la ciudad de Oruro –será bueno reactualizar que mediante Ley 922 de 26 de noviembre de 2004, el Supremo Gobierno le declaró Héroe Nacional, disponiendo su ascenso póstumo al grado de General de la República, incorporando a la vez su fecha de nacimiento al Calendario Histórico Nacional y a los textos de enseñanza; a gestión del H. Concejo Municipal que presidía la Prof. María Luisa Zevallos y la cooperación de diputados y senadores de entonces.

Fuente: LA PATRIA