Cuatro conflictos mineros de proporciones, se registraron en el departamento en la presente gestión, dos por la explotación de minerales y dos de carácter social.
El primero, el conflicto entre pobladores de La Joya, por la explotación de oro en el yacimiento del cerro del mismo nombre; el segundo por áreas de explotación de estaño en Japo, entre mineros cooperativistas de Oruro y Cochabamba, casi en el límite interdepartamental entre ambas regiones.
Los sociales fueron, en la mina San José, entre socios mineros, por presidir la Cooperativa Minera Multiactiva Corazón de Jesús y la pugna entre mineros sindicalizados de Inti Raymi, con los socios de la Cooperativa Minera Aurífera La Joya, que mediante su ex Asociación de Contratistas, instauraron un proceso laboral a la Empresa Minera Inti Raymi S.A. demandando el pago de 23.915.895 bolivianos, por concepto de beneficios sociales a raíz de una supuesta relación “obrero - patronal” entre ambas partes.
LA JOYA
El primer conflicto tiene lugar en el distrito de La Joya, ubicado a 45 kilómetros al Noroeste de la ciudad de Oruro, donde la Empresa Minera Comunitaria Inca Sayaña (Emcoisa), no puede ingresar a operar dentro sus 108 cuadrículas, las cuales están resguardas por la Cooperativa Minera Aurífera La Joya, que congrega a los miembros de la ex Asociación de Mineros Contratistas del Cerro La Joya.
Durante la gestión, la Gobernación intentó encontrar una solución de consenso para ambas partes, que pasó por la denuncia de la explotación ilegal de oro hasta la denuncia por la utilización de mercurio en el proceso de amalgamación de oro, por los cooperativistas.
Sin embargo, los cooperativistas sostuvieron que su trabajo es por la necesidad de ganar un sustento, hace poco ambos sectores reunidos en cabildo de la comunidad de La Joya, acordaron trabajar juntos en la explotación de oro.
JAPO
El conflicto entre las cooperativas “16 de Marzo” de Cochabamba y “El Porvenir Japo” de Oruro, surge el 11 de agosto, cuando se registra un primer enfrentamiento, que es pacificado por el presidente de la Federación Departamental de Cooperativas Mineras de Oruro, Agustín Choque. La causa, es el aumento de mineros en la explotación realizada por Pumiri en tierras fiscales de la Comibol, en la franja de seguridad que divide a Japo y Nueva San Pablo.
Durante la festividad del Señor de Lagunas, a principios de Septiembre, la Cooperativa Japo, solicita mayor presencia policial, ante el temor de agresiones entre comunarios de Pumiri y de Japo, que asisten a la fiesta patronal en Cala Cala, a 21 kilómetros al Sudeste de Oruro.
Entre el lunes 20 y martes 21 de septiembre se protagonizan enfrentamientos entre ambas cooperativas con 13 heridos, 5 de la cooperativa El Porvenir Japo, mientras Pumiri, difundió una lista de 8 heridos. El minero Pedro Condori, perdió el ojo derecho a causa de una pedrada.
El jueves 23 de septiembre, se protagoniza otro enfrentamiento, con la detención de Andrés Ramírez, que según el tesorero de la Cooperativa Japo, fue liberado, porque fue traído por la comunidad de El Porvenir y era “viejito”.
El conflicto que al principio fue catalogado como limítrofe, fue calificado por el Ministerio de Minería y Metalurgia, por áreas de trabajo, por el ello el 24 de noviembre, se gestionó una reunión con ambos sectores en conflicto para pacificar la zona, solución que llegó a medias.
MINA SAN JOSÉ
El conflicto interno de la Cooperativa Minera Multiactiva Corazón de Jesús, se registró el 20 de septiembre, a raíz del pedido de renuncia del presidente y fundador de la institución, Ramiro Helguero, que enfrentó a socios mineros de la cooperativa y los vecinos que la zona que apoyaban a Helguero.
Una parte de los socios de la cooperativa, acusaba a Helguero por supuestos actos de corrupción, además de estar más de 8 años en el cargo y no rendir cuentas.
El aludido, puntualizó que los movilizados fueron expulsados de la cooperativa por tratar de “sabotear” su gestión que estaba próxima a celebrar su aniversario, y que la toma de la mina San José es apoyada por otras cooperativas mineras que tienen rencillas con su persona.
El enfrentamiento del 20 de septiembre, se inició a las 07:00 horas de la mañana, terminando parcialmente cerca de las 18:00 horas tras la visita del Fiscal de Distrito de Oruro Gonzalo Martínez y el Secretario General de la Gobernación Edgar Sánchez, al yacimiento de minerales complejos, ubicado en el sector Oeste de la ciudad.
La jornada del 20 de septiembre, será recordada por la detonación de cachorros de dinamita durante el día, además, con la detención del presidente de Vigilancia de la Federación Departamental de Cooperativas Mineras (Fedecomin), Epifanio Flores Simón, que estuvo retenido por los vecinos de San José, al ser culpado de ocasionar el conflicto.
La unidad Educativa Guido Villagomez, próxima al yacimiento, tuvo que suspender clases por las constantes detonaciones de cachorros de dinamita y la presencia de varios mineros dispersados en los cerros, al apronte para cualquier conflicto.
En el yacimiento minero de San José, operado por la Empresa Minera del mismo nombre, trabajan 3 cooperativas mineras, la Cooperativa Multiactiva, la Salvadora y la 10 de Febrero, está última que mantiene peleas con la Multiactiva, pues en 2008, se enfrentaron por áreas de trabajo.
EMIRSA – EX CONTRATISTAS
El último conflicto registrado hasta el mes de diciembre, fue de la Emirsa y los ex mineros contratistas del Cerro La Joya, por una demanda por pago de beneficios sociales.
La Emirsa, puntualmente alude que la única relación con los ex contratistas es comercial, considerando a los contratistas “como pequeños empresarios mineros”, que vendían su carga primero a la Empresa Minera La Joya Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL), que realizaba la comercialización a la minera Inti Raymi.
La Empresa Minera Inti Raymi S.A. reveló que los ex contratistas durante esa relación facturaron entre 2004 y 2008 más de 19 millones dólares, por la venta de mineral de oro.
La causa es atendida por la Juez de Partido Segundo del Trabajo y Seguridad Social de Oruro, Edda Fiorilo Barrios, que determinó congelar las cuentas de la empresa que implicó el congelamiento del pago de sueldo del mes de noviembre y aguinaldo de los más de 2.000 trabajadores.
Los mineros se movilizaron el martes 9 de diciembre, en contra de la decisión de la jueza, con una bulliciosa marcha, consiguiendo el viernes 10 de diciembre acordar con Emirsa, el pago de sus haberes hasta el 17 de diciembre.
La Central Obrera Departamental (COD) y la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (Fstmb), apoyaron la causa de los trabajadores.
Fuente: LA PATRIA
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