Vladimir Putin cree que "funcionó" su estrategia

El primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, asumió hoy que su estrategia de no ir a defender personalmente la candidatura rusa al Mundial del 2018 "para no presionar a los miembros del Comité de la FIFA" surgió efecto, dado que su país ganó la competición.

"Creo que hice lo correcto", señaló Putin en una larga rueda de prensa que comenzó a las 21.30 hora local de Zúrich, tras hacer un viaje relámpago desde Moscú después de conocer el resultado de la votación que le otorgó la sede del Mundial del 2018.

"Yo estaba tranquilo de que teníamos una buena candidatura. Y entonces decidí no venir para que lo miembros de la FIFA pudieran hacer una votación objetiva sin ningún tipo de presiones externas", agregó.

Solicitado para que fuera más específico sobre las supuestas presiones externas, el primer ministro ruso contestó:

"Es inaceptable las presiones a las que fueron sometidos los miembros de la FIFA. Acusar a personas de corrupción sin ninguna razón, sin justificación, no se puede aceptar"

La FIFA hizo una investigación interna que acabó con la expulsión de dos miembros del Comité Ejecutivo, pero que "limpió" a la candidatura ibérica de las acusaciones de supuesto intercambio de votos con la árabe.

Precisamente, consultado sobre si consideraba que la candidatura de España y Portugal había sido su rival más difícil, Putin contestó que "era uno de las amenazas más serias".

"Estudiamos bien a España y Portugal, y sabíamos que tenía muchas ventajas, pero también desventajas, como el hecho de que fuera una candidatura conjunta, y sabemos que a la FIFA no le gustan mucho este tipo de candidaturas, porque se diluye la responsabilidad".

Con respecto a sus propias fortalezas, Putin afirmó que Rusia es un país "calmado y con una situación política estable".

"Nos estamos desarrollando bien, aunque tenemos algunos problemas que iremos solucionando".

Asimismo, recordó el legado que el Mundial dejará en su país y asumió como un hecho probado el que los miembros de la FIFA le hayan dado la sede a Rusia para poder "expandir las fronteras del fútbol".

El líder ruso asumió también los "debes" de su país, como uno de los señalados por el Comité de Evaluación: las deficiencia de sus sistema de transporte.

"Sabemos que tenemos un reto por delante, Rusia es un país muy grande y debemos mejorar nuestros aeropuertos, nuestras líneas de ferrocarril, nuestras carreteras, pero no sólo por el Mundial, sino por el país".

Aunque recordó que a pesar de que "Rusia es el país más grande del mundo", el Mundial tendrá lugar sólo en la parte Occidental, para ayudar a los desplazamientos.

Fuente: Zúrich, 2 (EFE).-