Sábado 06 de noviembre de 2010
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Editorial y opiniones
Corredor Ferroviario Transcontinental Puerto Suárez-Ilo
06 nov 2010
Por: Ramón Claure Calvi
La necesidad de un Sistema Ferroviario que integre al país a los cuatro puntos cardinales de nuestra geografía, no con el propósito de solucionar la pérdida de nuestro Litoral, se plasmó en el Tratado de 1904, cuyos ponderables conceptos de Paz y Amistad, jamás se practicaron.
El F.C. Arica-La Paz, resultado de dicho Tratado, hoy destruido en concordancia con los malévolos objetivos geopolíticos que Chile nos impuso desde 1879 hasta nuestros días, es una realidad que debiera ocupar el primer punto de la agenda gubernamental. Estudios a cargo de expertos, afirman que Chile por intercambio comercial que Bolivia practica por Antofagasta, Arica y otros del Pacífico, percibe impositivamente un neto de 3.0 mil millones de dólares al año, y no porque el Tratado de 1904 lo hubiese determinado, el hecho es que Chile, utilizó y utiliza dicho tratado imponiéndonos contribuciones diversas al tránsito de productos de uso y consumo. No hubo jamás libre tránsito.
El desarrollo de esta parte del Continente de la cual Bolivia es parte, está en el Pacífico y no en el Atlántico, de aquí la necesidad, partiendo de los nefastos resultados de la capitalización de los ferrocarriles y la disposición favorable del Perú, en un reciente encuentro entre Evo Morales y Alan García, Presidentes de Bolivia y el Perú, examinar la conformación de un nuevo diseño ferroviario: Puerto Suárez-Ilo, con una probable longitud de 2.240 Km., es decir, 250 Km. más entre Puerto Suárez-Arica.
