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Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 33 mineros, lección de fe y esperanza - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
Fueron muchas las frases que pronunció el Presidente de Chile Sebastián Piñera Echenique, en conferencia que brindó emocionado por tanta trascendencia, apenas salió el primer minero chileno (Florencio Ávalos), en la cápsula Fénix 2, las frases fueron como: “La esperanza es el sueño de los despiertos; que en tiempos de adversidad prevalece la unidad; los 33 mineros nos dan una lección de fe”; terminó agradeciendo a todos quienes trabajaron en la tarea singular y principalmente a Dios, nuestro supremo creador.
Cuando sucede un problema, a manera de consuelo se maneja la frase “por algo es”, lo ocurrido en la mina San José, verdaderamente es una lección para la humanidad, sobre la existencia de Dios, suceso que nos convoca a tener fe, en problemas que uno tiene, a seguir luchando, por que el otro día será radiante y lleno de esperanza, creo oportuno mencionar, lo que al respecto nos dice las sagradas escrituras en San Mateo 21 :21,22 ... Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, y no dudareis, no solo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate y échate en el mar, será hecho. Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.
El mundo entero en oración se volcó, hacia los 33 mineros que estuvieron atrapados en la mina San José, los resultados los conocemos, no me canso de repetir, sorprendente proeza de la cual fuimos testigos, ¡lo que la fe puede hacer!, el hecho encierra algo místico con la numerología, donde el número de 33 está relacionado a la edad de Jesús cuando murió, como también la fecha en que fueron rescatados los mineros el 13/10/10, cuya sumatoria da 33. ¿Casualidad?
A medida que se producía la salida de los primeros mineros una mezcla de sentimientos, sensaciones, alegría y llanto, se daba en cada uno de los televidentes, recordándonos que todos somos humanos, puesto que sin importar la nacionalidad, uno sentía el amor y cariño, los mismos son emociones que no tienen bandera.
Fue un hecho, que difícilmente uno no olvidará, porque nunca antes en la historia se produjo un rescate de tanta eficacia. Cuando se le cuestionó al Ministro de Minería de Chile, del ¿por qué se invirtió tanto dinero en el rescate de 33 personas y no en los damnificados del terremoto pasado?, éste contestó, no es lo mismo reponer una vivienda a un afectado que reparar la vida de las personas. Decisión digna de seguir como ejemplo por muchos países, puesto que muchas veces se dice que los recursos humanos de un país son muy importantes, pero éstos contrariamente están olvidados y sujetos a la explotación en el aspecto laboral, sin seguridad industrial o lo que es peor sin fuente laboral.
La suerte que tiene nuestro compatriota, que fue parte de los rehenes de la montaña, de tener ahora un empleo, con un sueldo de 7.000 bolivianos, aplaudo tal compensación de parte del Gobierno que realiza a favor del boliviano Carlos Mamani, recordemos que él no fue por turismo a Copiapó (Chile), sino como muchos otros bolivianos, en busca de fuente de trabajo, lo que encontró fue estar en el lugar llamado el refugio, 69 días, las penalidades y vicisitudes que seguro tuvo que pasar.
Uno se encuentra en la calle con amigos profesionales economistas, abogados y profesores, una mayoría de ellos lamentando su situación económica, porque no tienen un trabajo seguro, principalmente éstos últimos profesionales, que egresaron hace mucho años atrás de las escuelas Normales, que no encuentran trabajo porque no existe espacio laboral actualmente y desenvolverse para lo cual estudiaron; en una conversación anterior a lo sucedido en la mina San José, me expresaban que deseaban ser políticos para ganar bien, pero ahora éstos amigos me expresan que hubiesen deseado ser, uno de los mineros, para tener un trabajo seguro; el extremo que les hace manifestar a los amigos desocupados.
Con todo, no debemos perder la fe y esperanza en el desarrollo de nuestro país, porque está demostrado que la fe mueve montañas, aunque algunos por adelantado nos quieren hacer creer que estamos en un gobierno de cambio, porque si fuese así no creo que nuestro compatriota hubiese buscado trabajo en el exterior.
¿Qué dice usted amigo lector?
(*) Ciudadano boliviano
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