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Sábado 16 de octubre de 2010

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Revista Tu Espacio

PORTAL DE LA SABIDURÍA

Los 8 Virtudes de la Madre Universal

16 oct 2010

Fuente: LA PATRIA

Por: El Alquimista

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En el esoterismo Indú existe una hermosa enseñanza que nos habla del modo de vida que debe seguir un aspirante a la sabiduría para poder encarnar los atributos de un verdadero maestro, sintetizándose en 8 virtudes que debe desarrollar el adepto en perfecta armonía con la naturaleza, representada por la Madre Divina. Estas 8 virtudes constituyen un maravilloso código moral y ético para vivir en forma sencilla y plena todas las enseñanzas de los grandes maestros de todas las épocas. He aquí los ocho preceptos de la Madre Universal.

1. Que haya Amor: Para poder cumplir con el primer mandamiento debemos aprender a amar conscientemente. Debemos desarrollar el amor desinteresado y puro, que no juzga, que no compare, que no espera recibir algo a cambio, debemos aprender a amar con el corazón bien abierto, donándonos al prójimo, dispuestos a dar hasta la última gota de nuestra sangre por nuestro hermano. Es la clase de amor que ejemplificó el Maestro Jesús con su vida de servicio y sacrificio. El Amor se desarrolla mediante el servicio a la humanidad, mediante el despertar de la conciencia en nuestro interior.

2. Que haya Paz: Para que exista Paz en el mundo, debe desarrollarse la paz interior en cada uno de nosotros, porque la sociedad es la proyección del individuo. Mientras existan conflictos internos en nosotros: desasosiego, desesperación, frustración, batallas internas, temores, no habrá paz en el exterior. Debemos desintegrar dentro de nosotros todas las fuentes de conflicto: la soberbia, el orgullo, la vanidad, la auto-importancia, la auto-consideración, la ira, la impaciencia, la intolerancia, la codicia, la envidia, la gula, la pereza, el temor, etc., para poder experimentar verdadera paz en el corazón tranquilo, en armonía interior y con nuestros semejantes. Desintegremos todos los defectos psicológicos que nos tienen en guerra interiormente, solo así experimentaremos paz, por que habremos logrado desarrollar a Dios dentro de nosotros.

3. Que haya comprensión: Si no existe comprensión, no hay amor ni paz. La comprensión es sabiduría en acción, es la capacidad de situarnos en el lugar de los demás. Es mediante la empatía que podemos desarrollar comprensión. No debemos aceptar o condenar, solo debemos comprender, experimentar la verdad más allá del bien y el mal, más allá de los conceptos, teorías y suposiciones, solo experimentando la verdad podremos ser libres, podremos amar y tener paz duradera. La comprensión adviene a nosotros cuando nos encontramos con nuestro Ser en las profundidades del alma, cuando nos damos cuenta que en nuestro interior mora el tesoro de los tesoros y nos encontramos con él.

4. Que haya Voluntad: La voluntad no es deseo, muchas veces confundimos nuestros deseos con voluntad. Muchas de las cosas que hacemos, las realizamos por deseo y no por verdadera voluntad. La voluntad consciente es una fuerza mística poderosa que nos impele a realizar las cosas por amor, cumpliendo las leyes universales divinas, respetando el libre albedrío, en armonía con la naturaleza y el cosmos. La voluntad consciente es voluntad Cristo, es la fuerza de la sabiduría crística en acción, es la fuerza del amor divino empujándonos a desarrollar las virtudes eternas, a vivir de acuerdo al plan divino.

5. Recto Pensar: Es clave purificar nuestra mente de todos los pensamientos egoístas e interesados, que nos llevan a una manera de pensar equivocada. Debemos estar siempre alertas para descubrir que es lo que está pasando en nuestra mente, porque es en ella donde se gesta nuestra vida. Somos lo que pensamos, de ahí que es indispensable desarrollar el recto pensar, ya que la mente es la guarida del ego, del error, y es donde se justifica lo injustificable.

6. Recto Sentir: Gran parte de nuestras enfermedades son el producto de una mala canalización de nuestras emociones, de nuestros sentimientos. El recto sentir significa manifestar dentro de nosotros los más elevados sentimientos, las más elevadas emociones, que son las virtudes, (castidad, serenidad, humildad, altruismo, filantropía, diligencia y templanza), experimentando felicidad y plenitud. Por el contrario, cuando expresamos en nuestro interior los defectos psicológicos que son la manifestación del ego, (lujuria, ira, orgullo, envidia, codicia, pereza y gula), se expresan en nosotros las tinieblas que nos llevan a la infelicidad y la insatisfacción.

7. Recto Actuar (Recto Verbo): Si cumplimos con el recto pensar y el recto sentir, estaremos cumpliendo con el recto actuar, porque nuestras acciones son el producto de nuestros pensamientos y emociones cristalizando en acciones. Cuidemos nuestro verbo, desarrollemos un verbo creador en base a decir siempre la verdad, cueste lo que cueste.

8. Recta Manera de ganarse la vida: Nuestra forma de ganarnos la vida debe ser honesta y de respeto a las leyes universales. No podemos ganarnos la vida aprovechándonos del prójimo, engañando, robando, realizando actos de corrupción, depredando la naturaleza sin retornarle nada, polucionando nuestra morada planetaria, matando la vida. Nuestra manera de ganarnos la vida debe ser en base al servicio al prójimo, de apoyo al desarrollo del bien común.

Si basamos nuestras vidas en el cumplimiento de estas 8 máximas sencillas de la sabiduría universal, podemos estar seguros que estaremos viviendo de acuerdo al plan divino y nos desarrollaremos plenamente como verdaderos hombres y mujeres, para convertirnos en maestros y maestras de la vida, arquitectos conscientes de nuestros destinos y de nuestra felicidad.

Fuente: LA PATRIA
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