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Sábado 02 de octubre de 2010

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Revista Tu Espacio

Rincones de Mi Tierra

Mina de Todos Santos, ahora mina de Santa Rita, “el esplendor del pasado invita a comenzar de nuevo”

02 oct 2010

Fuente: LA PATRIA

Por: Maurice Cazorla Murillo – exclusivo para Tu espacio

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El título de esta nota fue sugerido en un concurso de fotografía en el que se exhibió una imagen que representa los antiguos desmontes y las ruinas de ingenios de alrededor. Este mismo de manera sugestiva, colocamos aunque extensivo en su título la característica de Oruro que dejó de ser una ciudad eminentemente minera; sin embargo, aún ostenta esta actividad en pequeñas proporciones con el encanto del pasado en distintos sectores de la ciudad que permanecen ocultos al ojo urbano en medio de copajira, ritos ancestrales, herramientas rudimentarias y la fortaleza del hombre y la mujer de interior mina, oficio heredado de tiempos inmemoros.

En nuestra visita realizada por nuestros Rincones, encontramos uno muy escondido, que resalta de cierto lugar al apreciar un antiguo elevador. No es fácil ubicarla a simple vista por el ángulo, pero invita a escudriñar sus parajes.

El cerro “Pie de Gallo” la cubre por entero.

El acceso en época colonial pudo haber sido difícil porque la vía anterior no era adecuada. En la actualidad una vía para espacio de movilidad puede dejar al visitante a una distancia prudente si es que no se cuenta con una propia que le lleve a la explanada de la mina.

La nominación de este cerro donde se ubica la mina corresponde a “cerro Rubiales” que en su interior cobija una maraña de niveles subterráneos que conectan antiguos socavones y galerías que ostentan el pasado minero glorioso de época colonial. Es muy posible que el elevador característico haya sido colocado a mediados del siglo veinte.

Ingresar a este escenario natural luego de apreciar la mina, sorprende por la naturaleza que lo rodea, se aprecia al fondo el maltratado cerro San Felipe por las antenas que afectan su estado natural y como la necesaria tecnología las precisa se levantan sobre el cerro más alto de la ciudad, a lado izquierdo la parte trasera del cerro Pie de Gallo. En este escenario, se pueden apreciar restos muy interesantes, entre ellos antiguas terrazas pre hispánicas para el cultivo de productos porque el sector en sí mismo es un ecosistema donde se puede presumir que el viento llega débil al sector; se pueden apreciar restos de antiguos trapiches dedicados a la recuperación de mineral muy rústicos, y la infinidad de bocaminas que se abren en los cerros que la circundan.

Este cerro denominado “Rubiales” como dijimos, cobija a la mina de Santa Rita, en la actualidad es explotado por varias cooperativas mineras que aún desarrollan esta sacrificada actividad descendiendo muchos metros por debajo de la superficie en jaulas especialmente diseñadas para el trabajo minero, debidamente mantenidas por un equipo que se dedica a este trabajo por ser esencial en estas labores.

Nuestra ciudad, en medio de contaminación visual, acústica, medio ambiental ofrece espacios que apaciguan el alma e invitan a la reflexión sobre el pasado minero, muy cerca de la ciudad pero muy escondido como otro de los tradicionales Rincones de Mi Tierra.

Fuente: LA PATRIA
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