Warning: inet_pton(): Unrecognized address in /home/lapatri2/public_html/wp-content/plugins/wordfence/vendor/wordfence/wf-waf/src/lib/utils.php on line 28
Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 La diferencia en Barak Obama - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
En medio de la polémica sobre el enfoque represivo del proyecto de Ley contra el Racismo, rescato el texto del especialista alemán en Derechos Humanos, Dr. Michael Werz, quien se presentó en La Paz con el auspicio del Goethe Institut y de organizaciones bolivianas de derechos humanos.
Werz asegura que la discusión sobre la dignidad humana no empezó en la Revolución Francesa como se afirma sino en el Nuevo Mundo; fue el debate sobre los pueblos conquistados lo que obligó a construir un humanismo moderno. Respaldó su afirmación con diferentes citas de hace 500 años.
¿Cuándo realmente comenzó esta construcción social de “racismo”? Y, sobre todo, ¿cuándo comenzó a cuestionarse ese antivalor de “raza”? Indudablemente que la tragedia étnica contra judíos y gitanos de la Segunda Guerra Mundial precipitó la Declaración de los Derechos Humanos de 1948. Pero fue en Estados Unidos de América, con el antecedente de la Declaración de Independencia del Siglo XVIII y a la vez su historia de racismo, donde comenzó el quiebre.
El incidente de 1957 en una escuela de Arkansas, donde los padres de familia blancos no querían el ingreso de nueve chicos negros fue respondido por Washington con el envío de tropas de élite. En 1958 se abolió el Acta de Integración racial que impedía los matrimonios interraciales.
La resistencia de unos fue violenta. De otros fue la propuesta pacifista; el mayor de todos ellos, Martín Luther King, fue asesinado en 1968. Robert Kennedy, hizo el discurso fúnebre, en medio de dos millones de dolientes rabiosos y anunció que la lucha apenas había empezado. “Las relaciones entre las razas cambian tan rápido que en cuarenta años un negro podrá ser Presidente de la Nación”.
Su utopía se cumplió y con unos ingredientes simbólicos que permiten a la sociedad estadounidense sentir que se hilvanan los hilos sueltos de su propia historia y lo más profundo de la comunidad. La elección de Barak Hussein Obama trasciende mucho más de los hechos cotidianos, buenos o no, de su mandato.
Él representa el reencuentro de Estados Unidos con su ideario de libertad; él mismo lo expresa así cuando comenta cómo se siente el hijo de una blanca y un líder tribal keniano, (no migrante), educado en diferentes espacios culturales, parte del imaginario de los descendientes de esclavos. Fue concebido en una época de prohibiciones, en pleno combate por los derechos civiles. ¡Honor a la valentía de sus progenitores que enfrentaron los prejuicios! Hay que leer el libro sobre su padre para entender su lucha y, sobre todo, su inteligente y pulcra serenidad.
Werz recordó que su éxito político mundial -Premio Nobel de La Paz- se debe a no colocarse en un vértice de la ecuación racial. Su actitud -incluso pidiendo reconciliación este 11 de septiembre- le dan la dimensión histórica del Siglo XXI, el siglo del nuevo contrato social (citó a Fauntroy) “donde la raza, las creencias y el color de piel jueguen sólo un rol secundario”.
Obama trasladó su biografía personal a la construcción nacional; “tengo muchas partes de Estados Unidos en mí”. “Nosotros logramos verdaderamente la unidad a partir de la multiplicidad”. Su discurso seguido por millones marca la diferencia: mirar el futuro, superar el pasado.
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.