Lunes 20 de septiembre de 2010
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Estudios efectuados por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd) y los viceministerios de Relaciones Exteriores y de Defensa Social y Sustancias Controladas, en una encuesta realizada a personas de entre 2 y 65 años, hace ya tres años, señalaban que 9 de cada 10 personas que consumieron bebidas alcohólicas durante el primer semestre de ese año, habían optado por la cerveza, el uno por ciento restante, había consumido, roncola, etanol, chicha, vino, singani u otras bebidas.
Todos sabemos que las fiestas folklóricas y/o religiosas más grandes del país, como el Carnaval de Oruro, Urkupiña, Gran Poder y la Entrada Universitaria de La Paz, son auspiciadas por una conocida empresa fabricante de cerveza.
Es espeluznante el dato siguiente publicado el 2002: “que en la entrada del Gran Poder, cada bailarín había consumido en promedio cuatro cajas de cerveza el día de la entrada. Sólo entre los danzarines (22.400) habrían consumido 806.400 botellas”.
Naturalmente tan alto porcentaje de consumo de cerveza en el país, provee de pingües ganancias a los fabricantes cerveceros, que según una información periodística de La Patria el día domingo 12 de septiembre, y reiterada en el mismo diario, el miércoles 15, la “Cervecería Boliviana Nacional (CBN) este 2010 realiza una inversión de 30.9 millones de dólares en sus plantas de producción ubicadas en La Paz, Oruro, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, como una agresiva política de inversiones y de credibilidad en el país”.
