Primer corredor bioceánico: Una prioridad compartida
13 sep 2010
Por: Jorge Lazzo Valera
La habilitación y emplazamiento del primer corredor biocéanico que unirá el Pacífico con el Atlántico, será una prioridad compartida por Chile, Bolivia y Brasil en la urgente necesidad de fortalecer, acrecentar y dar viabilidad al comercio internacional, que permitirá establecer un nuevo eje económico nacional.
La decisión del Estado Plurinacional -al menos por sus últimas acciones- muestra que quieren concluir la añorada ruta Oruro-Pisiga, puesto que la Comisión de Planificación, Política Económica y Finanzas de la Cámara de Senadores aprobó el financiamiento para construir el último tramo Toledo-Ancavi, con inversión mayor á 16 millones de euros, a ser financiados por la italiana Artigiancassa SpA.
Así el cincuentenario proyecto vial Oruro-Pisiga se actualiza en la agenda nacional del gobierno para garantizar un nuevo polo de desarrollo para Oruro, como eje central de esta integración biocéanica que además favorecerá a las regiones de Cochabamba y Santa Cruz, en el recorrido de la ruta que unirá las poblaciones fronterizas de Iquique en Chile y Santos en el Brasil.
Para habilitar el primer corredor bioceánico se debe aprovechar al máximo la excelente ubicación geográfica de nuestro departamento y con preferencia la ciudad de Oruro, que resulta ser el distribuidor natural que garantizará la conexión internacional con beneficio para todas las regiones del país.
La nueva vocación de desarrollo que debe ser aplicada para iniciar un importante intercambio comercial permitirá construir un nuevo polo de desarrollo para Oruro, que necesariamente debe partir por la generación de empleos y la diversificación de la economía, mayor producción y una vinculación directa a los mercados del Asía, por ser una ruta directa y más corta.
Esta nueva ruta internacional bioceánica debe ser la primera prioridad y la más urgente de los orureños, para concretar otros proyectos que tienen relación y son importantes para nuestra región, tal el caso del Puerto Seco, Aeropuerto Internacional y la construcción del Primer Parque Tecnológico para implementar modernas Tecnologías de Información, como complemento indispensable para las vocaciones de desarrollo económico y social, así como el desarrollo de la industria del software que beneficiará a Oruro con la transferencia de conocimiento a todo el mundo.
Ojalá esta vez se concrete y haga cumplir la ley que declara “prioridad nacional” la conclusión del proyecto vial Oruro-Pisiga, para vinculará el puerto chileno de Iquique con Oruro, Cochabamba y Santa Cruz para llegar al Brasil, como forma efectiva de conexión del Pacífico con el Atlántico. Este proyecto debía ser concluido el año 2008 y fue el propio presidente Evo Morales, quien aseguró su entrega antes de la finalización de su primer mandato.
En ese sentido hay que advertir que si no se concluye la construcción de la carretera Oruro-Pisiga, no habrá corredor biocéanico, no habrá Puerto Seco y seguirá postergado el desarrollo económico y social de los orureños.
Así también la ejecución del proyecto Oruro Puerto Seco es fundamental para conseguir un verdadero desarrollo regional, tener un control sobre la carga y los servicios portuarios, además de constituirnos en una zona de libre comercio por el flujo de las mercaderías que serán exportadas a cualquier país del mundo y de igual forma importadas hacia Bolivia, ubicando a Oruro en el contexto internacional.
Sin embargo no hay que olvidar que la reactivación de la minería es urgente para generar empleos y los impuestos por el pago de regalías, como única forma de garantizar en el futuro una economía sólida y fortalecida para la región, tomando en cuenta que el establecimiento del nuevo modelo económico regional no será de la noche a la mañana y llevará un tiempo su concreción.
Mientras ello suceda lo importante será otorgar seguridad jurídica para nuevas inversiones y el desarrollo de las actividades productivas, sancionando el avasallamiento o toma de yacimientos mineros, así como otorgar garantías para proseguir con la explotación de yacimientos de los mineros chicos, principal fuente generadora de empleo.
Urge de igual manera implementar con urgencia el Fondo de Reactivación Minera y diseñar una Política Minera Nacional para el Occidente del país, a fin de precautelar esta actividad para la adecuada provisión de concentrados si se quiere mantener a la minería como la principal actividad generadora de empleos y riqueza para Oruro.
No se puede dejar de lado la instalación de una Fundición de Zinc para diversificar la producción minera y evitar la exportación de materias primas, para generar nuevos empleos, que servirá además para tener un sistema productivo minero de acuerdo al avance de la tecnología que se complementa con la instalación de un nuevo horno en la Fundición de Vinto.
(*) Periodista
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