Una encuesta conducida por Techno Metrica Market Intelligence, una firma estadounidense de investigaciones, aseguró que un 56 por ciento de los estadounidenses apoyan un ataque de Israel unilateral y sorpresivo para evitar que Irán construya armas nucleares.
Mientras tanto el sitio web News Max reportó que otra encuesta realizada esta vez por Pew Research mostraba que un 66 por ciento de los estadounidenses favorecían un ataque de Israel sin coordinación con Estados Unidos, contra un 24 que lo objetaba.
La encuesta fue efectuada en 22 países en junio pasado donde una mayoría en 16 de ellos optaban por un ataque en solitario de Israel contra Irán.
Es necesario recordar que a finales del año 2006 el ex presidente George W. Bush indagó al Consejo Nacional de Seguridad si resultaba factible o no emprender una acción militar contra el programa nuclear iraní.
Sus principales expertos respondieron unánimemente que no era posible lograr eliminar todas las instalaciones nucleares de Irán con un sólo golpe aéreo ya que muchas estaban ubicadas en zonas densamente pobladas por civiles y otra en profundos túneles blindados.
SAPIENCIA ESTADOUNIDENSE
Podríamos hacer apuestas para adivinar cuántos de los que dicen que apoyan un ataque de Israel contra Irán saben en qué zona se desarrollará esa contienda bélica.
Según la reconocida revista National Geographic, solamente un 37 por ciento de los estadounidenses saben dónde queda Irán, un 17 por ciento saben dónde está Afganistán y hasta un sorprendente 11 por ciento no sabe ni siquiera donde queda su propio país en el globo terráqueo.
Según la misma fuente un 26 por ciento no sabe contra cuál potencia colonial Estados Unidos tuvo que luchar para alcanzar su independencia.
Menos del uno por ciento sabe que por ciento del agua en el planeta es potable y sólo un 53 por ciento de los adultos consultados conocían cuánto tiempo le toma a la tierra dar una vuelta completa alrededor del Sol.
La ubicación exacta del Océano Pacífico era un misterio para el 29 por ciento de los entrevistados, mientras que un 58 no sabía donde quedaba Francia y un 69 por ciento pensaba que Sudán quedaba en Asia.
Dos tercios de los adultos de Estados Unidos no pueden nombrar de memoria apenas a uno solo de los jueces de la Corte Suprema, según el diario The Huffington Post.
Otra curiosidad de la encuesta del National Geographic era que el 48 por ciento de los entrevistados pensaban que la mayoría de los indostanos eran musulmanes y tres cuartas partes no tenían idea de dónde queda Indonesia en un mapa.
Tres cuartas parte de los encuestados pensaban que el idioma inglés era el más hablado en todo el planeta y solamente un 67 por ciento podía ubicar al estado de Louisiana y un 52 al de Mississippi.
LLUVIAS QUE NO SECAN
El presidente estadounidense Barack Obama realizó grandes esfuerzos sin lograr éxitos por recuperar prestigio en los sectores pro israelitas en ocasión de la pasada visita a Washington del Primer Ministro Benjamín Netanyahu.
Obama tuvo deferencias de todo tipo y ofreció por primera vez desde su ascenso a la presidencia una entrevista a una televisora de Israel, informa el diario Jerusalem Post.
No obstante lo anterior la empresa Smith Research realizó una encuesta donde el 46 por ciento de los israelitas consultados opinaban que el actual gobierno estadounidense es pro palestino y que Obama es un musulmán practicante.
Jeff Harper del Comité Internacional contra las Demoliciones de Viviendas declaró que en estos momentos Israel se siente con las manos libres porque el gobierno de Barack Obama está muy ocupado en los preparativos para intentar ganar los comicios parciales de noviembre próximo y hará lo indecible por no incomodar al poderoso lobby judío.
Y hay que dar por seguro que Israel se aprovechará de esta realidad para sacar sus propias ventajas ahora que en agosto y septiembre se celebrará el Ramadán (período del ayuno) en muchos países islámicos a los que considera sus enemigos, apunta el sitio israelita: israel101.org.
El diario Haaertz comenta que es probable que Israel no opte esta vez por reabastecer en vuelo su flotilla de bombarderos sino que utilice aviones invisibles tipo Stealth para golpear a través de Georgia o Azerbaiján la retaguardia de Irán sin correr riesgos de que sus naves puedan ser atacadas por otros países árabes.
Lo cierto es que Israel nunca antes había estado tan aislado internacionalmente ya que varias naciones retiraron a sus embajadores a partir del ataque comando contra la flotilla de la solidaridad con Gaza.
Algunos de sus más destacados políticos como Tzipi Livini y el Vice Primer Ministro Moshe Yaalon han suspendido por ahora sus viajes al Reino Unido donde temen que puedan ser arrestados por actos de corrupción que pesan en su contra, asegura el diario Yediot Ahronoth.
El aislamiento puede empeorar si tomamos en cuenta que el Informe Goldstone, donde se acusa a las autoridades israelitas de crímenes de guerra, será analizado a finales de julio por la Asamblea General de Naciones Unidas y Turquía asumirá la presidencia del Consejo de Seguridad en septiembre próximo.
Desde el asesinato de Yitzhak Rabin en el año 1995 Israel ha sido gobernado por políticos que se han caracterizado por su agresividad lo que pretenden ocultar enmascarados en la propaganda y en la póliza de seguro estadounidense escribe el periodista del diario The Independent, Patrick Cockburn.
El mismo puntualiza que la última victoria militar israelita fue en la Guerra contra Siria y Egipto en 1973 y que en los últimos 37 años ha navegado de fracaso en fracaso.
(*) Jefe del Departamento de Difusión de Prensa Latina.
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