Aspectos que generan corrupción, en la administración pública
15 ago 2010
Por: José Ramiro Atahuallpa Vía
De manera general ya están tipificados en la ley 004, los tipos de corrupción por parte de funcionarios públicos, sin embargo ahora nos toca la reglamentación de esa ley general.
En la ley anticorrupción están tipificadas las conductas como la omisión, y el incumplimiento de deberes que son las más preferidas por los funcionarios públicos, es decir son en las que mayormente incurren y no lo hacen de manera culposa, sino lo hacen dolosamente y su fin es el enriquecimiento ilícito, pero ¿cómo funciona esta corrupción “disimulada y encubierta”?. Este tipo de corrupción se da principalmente en todos aquellos servicios que requieran de tiempo y plazo; me refiero a la tramitación burocrática de documentación sea de persona individual o persona jurídica, y en nuestro medio se pueden identificar estos servicios en: aduana, policía, registro civil, algunas reparticiones del municipio, universidad, justicia y educación principalmente.
Eficiencia y eficacia son dos aspectos que se manejan con bastante prolijidad en la administración y gestión de empresas privadas, pero también dentro la gestión pública en países desarrollados. Pero ¿dónde se puede evidenciar esta prolijidad efectiva y eficaz?, el año 2008 realicé un trámite de desaduanización, en Santiago de Chile, el protocolo o manual de desaduanización de mercaderías de la aduana de Chile indicaba un cierto plazo (4 días desde su arribo a recinto aduanero de Santiago) ello significaba que al cruzar la frontera se habían realizado los controles necesarios, y por ello su permiso para ingreso y traslado a recinto oficial. Al cabo de los cuatro días me dirigí a la oficina regional y eran las cinco de la tarde, y la oficial de tramitación me entregó la documentación y el permiso de sacar la mercadería de recinto aduanero.
En esta experiencia pude constatar que los plazos se cumplieron de manera exacta, pero también el trabajo administrativo; por tanto vemos que plazos y acción administrativa hicieron efectiva la gestión de desaduanización. Es sólo un claro ejemplo de “responsabilidad funcionaria”.
Ese mismo año y aprovechando mi estadía en Chile y de paso por Iquique, compré un vehículo y de paso algunas mercaderías, el vehículo lo transporte por camión y arribó a Zofro, en tanto la mercadería la traje con una agencia de importación. El hecho es que el automóvil salió al cabo de 28 días desde su arribo, pero después de peregrinar por varios funcionarios. Y una vez salida de Zofro me tocó otra peregrinación, la tramitación de la placa, por un lado un oneroso trámite en tránsito, pequeños cobros sin facturación, pero al cabo de unos días pude sacar esos documentos, con todo ello me apersone al Rua, que después de entregar unas dádivas al funcionario recogí la placa en 22 días.
En lo referente a la pequeña mercadería que traía de Zofri, ésta la pude sacar de Pisiga en 30 días. Lo curioso fue que juntamente con mi persona varios comerciantes habían adquirido la misma mercadería en la misma tienda de Zofri, pero ellos habían sacado la mercadería en tan sólo 8 días. Y preguntándole a uno de ellos las razones, me dijeron que después de comprar en Zofri se deben entregar las facturas y reexpediciones a los señores “piloteros”. Y en base a mis averiguaciones supe que los piloteros eran los tramitadores de las mercaderías y que estos ya tenían contactos con funcionarios de Aduana, con los Coas y demás autoridades que puedan encontrarse en el camino.
No es mi intención hacer comparaciones, pero se hacen necesarias para poder “visualizar” dónde comienza la corrupción y a partir de esa constatación empezar a construir mecanismos primero de transparencia; y segundo, mecanismos de eficiencia y eficacia.
Un hecho que me llamó la atención es que las mercaderías en Zofri – Iquique, los precios varían de un día a otro; es decir si una mercadería tenía un costo para hoy, para mañana tendrá otro, pudiendo ser más barata o más cara, y viendo la activa economía China, generalmente los precios bajan. Y de este aspecto los comerciantes saben y coyunturalmente deben de aprovechar al máximo. Cuánto más tarda el despacho de mercaderías más pierde el comerciante y de esta situación saben tanto funcionarios de aduana como los Coas, por ello de manera intencional hacen tardar lo más que pueden la salida de mercaderías, pues ya saben que existen los piloteros que deberán “pagar o hacer la coima” para que salgan sus mercaderías.
La falta de protocolos o manuales que indiquen los plazos de desaduanización o tramitación de cualquier documento genera impaciencia en el usuario, esta situación es aprovechada por los funcionarios de todas las reparticiones del Estado. Por estas situaciones necesitamos reglamentar la ley 004, y que cada institución tenga manuales o protocolos de tramitación “efectivos” en tiempo y plazo, y en caso de incumplimiento y omisión no sólo deben existir las sanciones de tipo administrativas que son una llamada de atención o saludos a la bandera, sino procesos penales para funcionarios públicos.
(*) Experto en desarrollo local
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