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Domingo 01 de agosto de 2010

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Revista Dominical

25 años de vida institucional

La Universidad de los mineros promueve el desarrollo del Norte de Potosí

01 ago 2010

Fuente: LA PATRIA

Por: Carlos Zárate Angulo - Periodista

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Fue gestada por la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) en su empeño revolucionario de llegar al socialismo mediante un mecanismo científico formador de profesionales orgánicos y antiimperialistas. “Hemos Resuelto: La fundación de la Universidad Nacional Siglo XX, como resultado concreto de una larga ansiedad de los trabajadores bolivianos por contar con una fecunda herramienta para satisfacer nuestra impostergable necesidad, tanto de elevar y metodizar nuestros niveles de capacidad profesional, productiva y administrativa, así como de consolidar nuestra posición revolucionaria, precursora y vanguardia del avance del pueblo hacia el socialismo” reza el párrafo de la declaración de principios, documento que fuera elaborado en 1.980.

El periplo ideológico se inició con la Asamblea Popular a inicios de los 70, para luego recorrer un largo camino orgánico que pasó por asambleas generales, congresos mineros y comisiones específicas. Por último, el tramo legal administrativo --que siendo un calvario para sus gestores-- culminó en el VI Congreso Nacional de Universidades, en 1.984, en la ciudad de Tarija, donde se aprobó la creación de dos nuevas universidades, la Universidad Amazónica de Pando y la UNS XX. Todo este proceso duró más de una década.

El 1 de agosto de 1.985, al amparo del D.S. 20979 firmado por el presidente de entonces Hernán Siles Suazo se creó la denominada Universidad Obrera que abriría sus puertas oficialmente a la población boliviana 24 días más tarde, siendo su primer Rector el destacado intelectual Isaac Sandoval Rodríguez y el primer Vicerrector, el luchador dirigente minero Cirilo Jiménez.

Los promotores del proyecto se fijaron en una región minera y agrícola por excelencia para su establecimiento y determinaron instalar sus predios centrales en Llallagua una populosa población ubicada en la provincia Bustillo del departamento de Potosí, además de ampliar su radio de acción a los distritos mineros circundantes. El nombre y el lugar donde nació la universidad, representa para sus creadores, un homenaje a los mineros que durante todo el siglo XX fueron el sostén de la patria, la vanguardia del proletariado y en diferentes oportunidades fueron masacrados impunemente por sus luchas reivindicacionistas (La masacre de Uncía; la masacre de Catavi; la masacre de San Juan, la masacre de Amayapampa y Capacirca, entre otras). Toda esta región se constituye en el centro urbano del Norte de Potosí. Lamentablemente, pese a las ingentes cantidades de mineral que se explotó durante los últimos dos siglos, toda esta región es conocida en el ámbito nacional e internacional como referente de la extrema pobreza en Bolivia.

DESARROLLO REGIONAL

Ni duda cabe que en los últimos 25 años, la vigencia de la UNS XX dio un impulso vigoroso a la consolidación de Llallagua como ciudad intermedia y a desmitificar de alguna manera el paradigma de la pobreza en la región. Esta ciudad vive del comercio, la minería y la universidad; aquí convergen miles de campesinos llegados de cientos de pueblos y rancheríos a comercializar sus productos y a comprar sus requerimientos de vida, otros tantos se quedan atraídos por las vetas estanníferas de “La Salvadora” en Uncía que representa una buena alternativa laboral. Esta región tuvo un pasado glorioso a principios del siglo XX con el apogeo de la minería, particularmente en Uncía que a la fecha atesora un caudal turístico impresionante que rememora la época de oro de la minería en Bolivia.

En la actualidad, Llallagua es el ícono citadino de todo el Norte de Potosí; cuenta con todos los servicios básicos y el crecimiento demográfico urbano tiene un buen ritmo. Por la vigencia de la universidad, la juventud tomó carta de ciudadanía y su presencia se destaca principalmente en el transporte público, los servicios alimenticios, las plazas, los centros comerciales y en los centros de diversión. Miles de estudiantes llegados del interior virtualmente transfiguraron la vida cotidiana convirtiendo a Llallagua en una ciudad universitaria, cuya inyección económica es importante para mantener latente el pulso de vida de la región norte potosina y la esperanza de revertir paulatinamente la pobreza, como ya se puede advertir en las últimas dos décadas.

Importante infraestructura educativa, edificios de gran envergadura, recursos económicos sostenibles, fuentes de trabajo, salarios permanentes y la estadía de casi 5 mil estudiantes llegados del interior, hacen que el movimiento universitario sea un sólido referente del desarrollo regional que no solo se destaca en Llallagua, sino que se extiende a los distritos mineros aledaños de Siglo XX y Catavi, que otrora fueran el referente de la minería estatal y el sindicalismo minero boliviano.

“La UNSXX en estos 25 años significa principalmente para el contexto regional un avance en la generación de recursos humanos y una oportunidad para los jóvenes quienes pueden alcanzar una profesión; es relevante la presencia de la universidad en la región por que genera movimiento económico, político e histórico” afirmó categóricamente el Rector Dr. David Gonzáles Mariscal al señalar que en la actualidad todas las carreras cuentan con infraestructura propia y laboratorios modernos, gracias a los recursos del IDH.

OFERTA ACADÉMICA

La UNSXX es la única del sistema boliviano que reconoce el Trigobierno en su organización interna; es decir que además de los estudiantes y docentes en el Consejo Universitario participan con voz y voto los trabajadores mineros, representados por un delegado de la FSTMB quien también cumple la función de Vicerrector.

Bajo esta concepción ideo política, el pensamiento revolucionario de la clase obrera se inculca a los universitarios por intermedio de materias transversales impartidas por la Dirección de Formación Política y Sindical (FPS) cuyas notas tienen un porcentaje relevante en los resultados finales obtenidos por los universitarios en cada materia; situación que se da en todas las carreras.

La universidad obrera oferta 3 niveles de formación: Licenciatura (5 años), Técnico Superior (3 años) y Auxiliar y Técnico Medio; cuenta con tres áreas: Social, con las carreras de Ciencias de la Educación, Derecho y Comunicación Social. Área Tecnológica: con las carreras de Agronomía, Minas, Topografía, Mecánica Automotriz, Electromecánica. Y por último, el Área de Salud: con las carreras de Bioquímica y Farmacia, Enfermería, Odontología y Laboratorio Clínico; a partir del mes de agosto de este año, se iniciarán los cursos preuniversitarios de Medicina, una de las tres carreras recientemente creadas, junto a Ingeniería Civil y Contaduría Pública.

También existen ofertas académicas en los centros mineros de Telamayu con las carreras de Enfermería y Electromecánica; Huanuni con las carreras de Minas, Topografía y Electromecánica; en Colquiri este año se creó las carreras de Auxiliar de enfermería, Mano de Obra Calificada en Motores, Técnico Medio en Agronomía; también tienen un curso de extensión en Pocoata para formar enfermeras obstetricias en el marco del programa “Salud familiar e intercultural” que cuenta con financiamiento externo.

Por otro lado se destacan los cursos de Post Grado y los programas específicos como los que ejecuta junto a la Fundación FAUTAPO, que promueve la formación a distancia de profesores a nivel licenciatura; el programa Periodismo a Distancia, el Programa Especial de Antiguos Egresados, que según sus autoridades, es para rescatar a los egresados de gestiones pasadas.

CAMINO COMPLICADO

Cuando nació la UNSXX a la vida pública, su vigencia no podía ser más auspiciosa por que los trabajadores mineros de todo el país determinaron aportar mensualmente con un boliviano a las arcas de la nueva superior casa de estudios; este principio de autogestión motivó expectativa generalizada, sin embargo, un año después de su fundación, entró en vigencia el decreto 21060 que “relocalizó” a más de 30 mil trabajadores mineros dejando sin efecto los mencionados aportes. La “marcha por la vida” fue la primera movilización organizada que realizaron los universitarios en 1.986, templando su carácter con la dramática situación que afrontaron los trabajadores mineros. Por entonces la infraestructura que utilizaba la universidad pertenecía a la Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) y en la mayoría de los casos se trataba de ambientes viejos o adaptados a las necesidades de la nueva universidad.

Con el paso de los primeros años, la lucha por el presupuesto universitario representó una verdadera gesta institucional, particularmente en lo que se refiere a la Coparticipación Tributaria con la Universidad Tomás Frías de Potosí. El escritor Grover Cabrera García, narró en términos de epopeya y en verso la movilización que sostuvo el estamento universitario y pobladores del Norte de Potosí en la ciudad de La Paz el año 2.000; más de 3 mil universitarios sostuvieron un duro enfrentamiento con el gobierno de entonces hasta lograr la Coparticipación Tributaria que le consolida en términos presupuestarios. “La región toda ¡oh universidad!/se siente orgullosa por tu hazaña;/pues, libre ya de toda sinuosidad/anhela, contigo, un mejor mañana” escribió Cabrera.

Desde esa fecha, el crecimiento en infraestructura es impresionante, puesto que los reportes económicos por el IDH, se aumentaron considerablemente.

En los 25 años de vida, también la UNSXX despertó plenamente el interés de la población civil organizada que durante todo el mes de julio, juntas vecinales y el Comité Cívico promovieron una serie de observaciones, particularmente sobre algunos casos de nepotismo y observaciones administrativas; por alguna razón, el presupuesto se mantiene como “secreto de Estado” inclusive existe alguna restricción de información a la prensa. Sin embargo, esta situación no hace más que confirmar la importancia de la UNSXX en el ámbito regional que se refleja en el interés de los pobladores para mirar más de cerca esta institución pública.

La acreditación de algunas carreras, la implementación de otras y sobre todo elevar permanentemente el nivel académico, son algunos de los desafíos que tiene la Universidad Obrera en un camino largo por recorrer en beneficio de la región.

ANIVERSARIO

Para celebrar las Bodas de Plata de la Universidad Obrera, las autoridades elaboraron un extenso programa de festejos que se dio inicio a principios de julio con la 1ra. Feria Nacional del Libro que reunió a las más destacadas empresas editoriales del país, actividad que se complementó con talleres y coloquios.

El pasado día sábado 24 de julio se realizó la emotiva entrada universitaria con la participación de 32 fraternidades. Para este día sábado 31 de julio se programó el desfile de teas y la verbena popular y el lunes 2 de agosto, en el coliseo Paulina Medrano de Siglo XX se desarrollará el acto central académico con la participación de todo el estamento universitario, autoridades regionales e invitados especiales.

(*) El autor es Secretario de Relaciones de la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB).

Fuente: LA PATRIA
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