Ley de Seguridad Vial

Increíblemente, nuestro país resulta el más atrasado en la región en materia legislativa que regule la "seguridad vial", en carreteras y en las calles de nuestras ciudades, se menciona que se hicieron varios intentos, en algunos casos de orden departamental para tratar de regular la actividad de conductores de movilidades, lamentablemente con resultados poco efectivos, debido principalmente a la presión ejercida por chóferes agremiados que se resistieron a cumplir normativas reglamentarias para conducir motorizados, como los de servicio público que transportan cantidad de ciudadanos.

A propósito del importante tema, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, confirmó que la redacción de la Ley de Seguridad Vial había concluido en esa fase inicial de tratar el anteproyecto y que correspondía como segundo paso enviar el mismo a la Unidad de Análisis de Políticas Sociales y Económicas (Udape) para lograr el visto bueno que permitirá su tratamiento y aprobación en la Asamblea Legislativa Plurinacional para la promulgación de rigor por parte del Primer Mandatario y su aplicación a nivel nacional.

Todo un largo proceso que nos muestra esa parte burocrática del tratamiento de los anteproyectos de leyes, que como en este caso, parece que no estaba en las prioridades de quienes deben elaborar instrumentos que cuiden la seguridad ciudadana y que como el asunto de la seguridad vial implica una responsabilidad de primer orden, más aún sabiendo que nuestro país es el único de la región que carece de un instrumento normativo y regulador del transporte público y privado.

La frecuencia de los últimos accidentes, el número de víctimas fatales, la cantidad de ciudadanos heridos y la destrucción de unidades motorizadas a causa de los accidentes, representa un factor altamente negativo para muchas familias, tomando en cuenta que la mayoría de los hechos responden a "fallas humanas", entre esas la principal, conducir vehículos bajo efectos del alcohol, sumándose en otros casos imprudencia, exceso de velocidad y con menos incidencia el factor de fallas técnicas. Todos esos factores fuera del control de una legislación severa, que evite transgresiones que atentan contra la seguridad de las personas.

De acuerdo al anticipo que realizó el ministro de gobierno sobre el contenido de la Ley de Seguridad Vial, se menciona principalmente la aplicación de fuertes multas a los responsables de todo tipo de accidentes que sean resultado de "conducción peligrosa". Se incluirá además en el nuevo cuerpo legal medidas tecnológicas que deberán ser obligatoriamente aplicadas en las instancias de control del transporte público interdepartamental, interprovincial y en el sistema urbano, como una condición que autorice el manejo y la circulación de motorizados en general.

Se asegura que la nueva normativa establecerá procedimientos automatizados de control del estado mecánico de los vehículos, además que modernos radares serán activados para un seguimiento de motorizados, en el caso de arterias de tráfico conflictivo y en algunas carreteras funcionarán radares que podrán registrar el movimiento de las movilidades, su velocidad y la correcta conducción por parte de chóferes que también serán controlados en los retenes policiales.

Todo parece mostrar que habrá una Ley de Seguridad Vial efectivamente operativa, con la especial motivación de disminuir la siniestralidad en el sector del transporte, exigiendo mayor responsabilidad de propietarios y chóferes de servicio público, pero también de los conductores del sector particular. Las infracciones serán también causa para la suspensión de licencias de conducir, temporal o definitivamente, si el delito corresponde especialmente a la conducción en estado de ebriedad. Todos esperan que la ley se apruebe, cuanto antes mejor.

Fuente: LA PATRIA