Cuando sube la presión en algunos sectores sociales reclamando atención a un listado de necesidades o cuando simplemente se aprovechan circunstancias especiales que favorecen actividades partidarias, se dictan y se promulgan ciertas leyes que deberían tener un efecto benéfico para la mayoría de los ciudadanos del país, pues eso se espera, si de leyes se trata.
Días atrás y sin que antes se hubiera mencionado su preparación, tratamiento de consulta y búsqueda de consenso por la característica de una disposición que tiene que ver con millones de afiliados y en una entidad que presta servicios de salud, se aprobó y promulgó la Ley 1189 de Prioridad Nacional de Desarrollo y Crecimiento de la Caja Nacional de Salud (CNS). Ya está vigente aunque muchos "asegurados" no tengan idea de lo que se pretende hacer con sus aportes, que son los fondos del seguro social.
Resulta interesante saber que el instrumento en cuestión alentará la construcción de 67 hospitales y centros de salud, para mejorar la atención médica de los miles de afiliados. El Primer Mandatario justificó su decisión atribuyéndola a un pedido de la COB, añadiendo un "bono de riesgo" para trabajadores manuales de la misma CNS. El hecho es que dirigentes sindicales de varios sectores y los representantes de los aportantes, activos y pasivos, no "recuerdan" haber instruido ese pedido a la dirigencia de la COB.
Resulta interesante saber que el instrumento en cuestión alentará la construcción de 67 hospitales y centros de salud, para mejorar la atención médica de los miles de afiliados. El Primer Mandatario justificó su decisión atribuyéndola a un pedido de la COB, añadiendo un "bono de riesgo" para trabajadores manuales de la misma CNS. El hecho es que dirigentes sindicales de varios sectores y los representantes de los aportantes, activos y pasivos, no "recuerdan" haber instruido ese pedido a la dirigencia de la COB.
Pero el hecho está hecho, y se asegura que la Ley fortalecerá a la CNS, pues se construirán 67 nuevos hospitales y centros de salud. Del total de la nueva infraestructura, se habilitarán dos hospitales de segundo nivel, dos de tercer nivel con especialidades, un centro de enfermedades cardiacas y renales, tres centros oncológicos, dos institutos de investigación de seguridad social y salud ocupacional y habrá 57 centros de salud. De esos establecimientos, 16 estarán en La Paz, 21 en Santa Cruz, 8 en Cochabamba, 6 en Oruro, 4 en Chuquisaca, 2 en Tarija, 3 en Potosí, 5 en Beni y 2 en Pando. La Ley no explica en qué se basó la distribución ya definida.
Otro dato interesante y que necesariamente deberá ser aclarado, explicado, aceptado o rechazado, de acuerdo a las circunstancias, hace saber que "durante mucho tiempo se seguían acumulando recursos de la CNS, hoy en caja y banco y que suman más de 7 mil millones de bolivianos, dinero que no puede seguir guardado" mientras siguen las colas en consultorios de la CNS", apuntó la ministra de salud. Añadió la autoridad que la nueva infraestructura será construida con una inversión de 3 mil 615 millones de bolivianos. Se estima algo más del 50% de los recursos que estaban "guardados". Un tema muy sensible cuya aclaración exigirán los miles de asegurados.
Se aclaró que para este tipo de financiamiento se utilizarán dos fuentes de ingresos, una la de "recursos financiados" y la otra a través del rendimiento por inversiones que permite a la CNS, el uso de hasta el 30% de los saldos de caja y bancos, según refiere la norma. Se completa el proceso disponiéndose que el proyecto tenga un seguimiento a cargo de la gerencia general de la CNS, del directorio de la autoridad de supervisión de la seguridad social y la COB. No se menciona específicamente a delegados de los miles de afiliados, dueños de los aportes y que deberían tener tuición directa en fiscalizar el buen uso de sus recursos, por encima de cualquier injerencia político sindical.
Fuente: LA PATRIA
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