Este minino de una camada de tres fue adoptado. A un principio, sus nuevos amos no sabÃan cómo educarlo porque era la primera vez que habÃan tenido un gato y una de las preocupaciones que tuvieron fue pensar acerca de una enfermedad denominada Toxoplasmosis o los mitos de la infertilidad, que llegó a sus oÃdos por familiares. Sin embargo, tomaron todos los recaudos del caso para que Hiro no tenga esa enfermedad.
Pasó el tiempo, se familiarizó con sus hermanas caninas Hebe, Tigrilla y Layka, y su comportamiento comenzó a cambiar, como si fuera un perro.
Esperaba a la familia en la puerta cuando se aproximaban a casa, imitando a sus hermanas. Asimismo, se consiguió como juguetes favoritos una cadena y un oso. En el caso de la cadena, la trataba como una pelota y cuando se la lanzaba, la traÃa de vuelta para volverla a lanzar.
Esperaba a la familia en la puerta cuando se aproximaban a casa, imitando a sus hermanas. Asimismo, se consiguió como juguetes favoritos una cadena y un oso. En el caso de la cadena, la trataba como una pelota y cuando se la lanzaba, la traÃa de vuelta para volverla a lanzar.
Mientras que su oso era intocable, nadie podÃa acercarse a ese juguete y menos tomarlo, porque lo agarraba fuertemente, comenzaba a gruñir, tal cual un can.
Hiro es muy mimado, le hacen ejercitar, se lo saca por la calle para que camine, siempre con una correa, evitando canes callejeros y cuidándolo de ruidos muy fuertes.
Su ropa es confeccionada a mano, ya que no hay vestimenta de su talla. Una de las más atractivas es una camiseta de Croacia.
Al final Hiro es un gato simpático con dotes caninas y como añadidura a veces adopta actitudes de gallina, porque suele sentarse sobre los huevos que están encima de una nevera.
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