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Domingo 07 de julio de 2019

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Revista Dominical

Acontecimientos históricos que perduran como un antes y un después de la Guerra del Chaco

07 jul 2019

Por: Aníbal Abel Alarcón Caparroz - Poeta - Escritor

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ANTECEDENTES

En ocasión de la producción cinematográfica sobre el desarrollo de la contienda bélica de la guerra del Chaco, filmada en su integridad por un soldado aficionado de nacionalidad paraguaya, que por otra parte, la característica particular se circunscribía en que esta filmación (como no podía ser de otra manera), fue un valioso documental que después de casi ochenta años fue puesto a conocimiento de gente que de veras (hasta ese momento), no había tenido ni la más remota idea que le pasaba por la cabeza. Este pasaje tormentoso repleto de sinsabores que duró nada más y nada menos que cuatro años de martirio, con valerosos combatientes que, desde la morfología del terreno inhóspito, rodeado de toda clase de alimañas dañinas a la salud de todos los héroes soldados. En la película rodada en el cine Gran Rex y auspiciada por el staff del gerente y directora respectivamente del Matutino la PATRIA. Se graba en la memoria toda clase de peripecias sorteadas por ambos bandos (paraguayos y bolivianos), cuando sin ir muy lejos, las provisiones de alimentos vituallas y más que todo el agua, quedaban varadas a más de 180 kilómetros con camiones enfangados por la desastrosa vía caminera improvisada; mientras que con el civismo que brotaba a flor de piel, el heroico soldado sobrevivía a plan de una que otra yerba o carne de lagartija o víbora. En fin, fue una especie de chispazo en la mente de quienes tuvimos la suerte de ex pectar semejante barbarie, que a través del tiempo fue aclarándose que más que una guerra fue una masacre de la naturaleza a cincuenta grados centígrados de calor de sol demasiado ardiente de extrema temperatura. Por otra parte, no se menciona el tiempo de combate porque era parte de una producción del cine-silente?, pero ahora nos recuerdan algunos pasajes de los pocos libros como del autor Augusto Céspedes que menciona: "Durante 35 meses, vivieron, combatieron y murieron nuestros soldados, trasladados a la guerra del Chaco sin ningún motivo, sin nada de planificación, menos preparación e instrucción militar".

Entonces, también menciona?, "Luego, para proveer a los soldados maltrechos como sucedía con el II Cuerpo de Ejército boliviano y división Picuiba, en la época seca, los camiones aguateros debían desarrollar un trayecto de 150 a 180 km., diariamente desde el Pilcomayo (único río que cruza las candentes arenas del Chaco), para llegar a Carandaiti, por caminos en los que la tierra se arrugaba en surcos de polvo y lodo, mientras leguas más allá y en pleno tiroteo, aguardaban en vano el líquido vital heroicamente bajo el cielo grisáceo?, torbellino de arena candente del desagradable lugar.

BREVE

REMINISCENCIA HIST?RICA

La historia oficial da cuenta de que la Guerra del Chaco, entre Paraguay y Bolivia, se libró desde el 9 de septiembre del año 1932 hasta el 12 de junio de 1935, por el control del Chaco Boreal. Fue la guerra más importante en Sudamérica durante el siglo XX.

En los tres años de duración, Bolivia movilizó 250.000 soldados y Paraguay 120.000, que se enfrentaron en combates en los que hubo gran cantidad de bajas, heridos, mutilados y desaparecidos.

Sin embargo; "la historia está plagada de mitos", suelen decir los historiadores. Coinciden con ello quienes narraron algunos eventos sobre la Guerra del Chaco, la contienda que enfrentó bélicamente a Bolivia y Paraguay entre 1932 y 1935. Este 12 de junio se cumplieron 84 años de la firma del Protocolo de Paz.

Algunos historiadores bolivianos después del cese de hostilidades se atrevieron relatar la historia escrita por autores bolivianos y paraguayos respectivamente. Este acontecimiento de mitos que hacen ver a Bolivia como la gran perdedora de esta guerra o que las transnacionales petroleras fueron las causantes de la última contienda internacional en América Latina.

Algunos historiadores bolivianos después del cese de hostilidades se atrevieron relatar la historia escrita por autores bolivianos y paraguayos respectivamente. Este acontecimiento de mitos que hacen ver a Bolivia como la gran perdedora de esta guerra o que las transnacionales petroleras fueron las causantes de la última contienda internacional en América Latina.

LA GUERRA

NO FUE POR EL PETR?LEO

La herida por la pérdida del océano Pacífico con Chile generó en el país la necesidad de buscar una salida alternativa al mar. Los ojos bolivianos miraron entonces al Atlántico, cuyo acceso se podría dar a través del río Paraguay. El problema que había que enfrentar: incursionar el inhóspito Chaco Boreal, disputado desde 1879 por Bolivia y Paraguay.

La historia se desarrolla en ese contexto, en la fuerte relación y efecto que tuvo la Guerra del Pacífico; pero la versión paraguaya y el "complot" contra Bolivia vino de sectores foráneos tal como indica algunos párrafos de libros editados también por gente foránea

Finalmente, se coincide con aquello que afirma un autor; que desde los años 20, el país consideraba la necesidad de sentar soberanía sobre ese extenso y despoblado territorio. En ese sentido, Daniel Salamanca había insistido en esos años en "pisar fuerte en el Chaco". Cuando llegó al poder en 1931, era lógico que tratara de poner eso en práctica.

Haciendo referencia a una carta del general Filiberto Osorio, jefe del Estado Mayor en 1932, da cuenta que Bolivia buscaba asentarse progresivamente en el Chaco a través de fortines y asentamientos humanos para afianzar la soberanía boliviana sobre ese territorio.

Es así que, en junio de 1932, un contingente boliviano, sin autorización del Alto Mando, toma el fortín paraguayo Pitiantuta en la laguna Chuquisaca y da el primer paso para acceder al río Paraguay, principal vía para salir al Atlántico. Fue Osorio, mediante la carta mencionada, quien reveló que esa acción militar no tuvo una orden del Alto Mando.

El número de muertos bolivianos que dejó la Guerra del Chaco varía en diferentes historias. El escritor y excombatiente Roberto Querejazu lanzó una de las primeras cifras que da cuenta que Bolivia sufrió al menos 50.000 bajas.

Esas cifras no pudieron haberse conocido inmediatamente después de la guerra, porque el país demoró 50 años en ordenar la totalidad del archivo del Departamento Primero del Estado Mayor, donde se encuentran documentos de la Guerra del Chaco.

El general Tomás Peña y Lillo, exdirector de la Academia Boliviana de Historia Militar, refuerza esa idea y da a conocer que un total de 170.000 hombres fueron movilizados para la guerra, de los cuales aproximadamente 30.000 murieron ¿?

¿Bolivia estaba preparada para la guerra? Hay versiones que dan cuenta que no lo estaba, que carecía de armamento y medios para hacer frente a Paraguay. La versión paraguaya dice por su lado que Bolivia ostentaba mayor fuerza bélica y que ellos sólo "poseían machetes". Eso es verdad porque Bolivia tenía hasta Fuerza Aérea y armamento sofisticado de industria alemana como el fusil Máuser, norteamericana e inglesa en equipamiento.

Bolivia, por ejemplo, compra en 1927, (un año antes la toma del fortín boliviano Vanguardia por parte de los paraguayos, considerado el primer roce bélico), armamento de la empresa inglesa Vickers Armstrong para empezar a equipar a un Ejército de 40.000 hombres.

Hans Kundt era un alemán que había llegado a Bolivia luego de su participación en la I Guerra Mundial. Se hizo cargo de la campaña boliviana en el Chaco entre 1933 y 1934 y logró importantes victorias, pero también derrotas, la más importante: Campo Vía, donde cayeron prisioneros al menos 7.500 bolivianos y se perdió ingentes cantidades de armamento.

El hecho fue considerado el peor desastre de la guerra y fue utilizado para responsabilizar al alemán de la supuesta "derrota" boliviana en la guerra; pero sus aportes fueron importantes, contrariamente a lo que se señala. Se sostiene que con Kundt a la cabeza del frente boliviano se lograron los "más grandes ataques a Paraguay". "Campo Vía es la gran pérdida de Bolivia, se lo destituye a Kundt y asume Enrique Peñaranda (1934-1935) y con él se tiene una serie de nuevas pérdidas".

La Guerra del Chaco duró seis años, tres en los campos de batalla y otros tres en la diplomacia. En esta segunda etapa se tuvo movilizaciones subrepticias y amenazas de reinicio de guerra de parte de Bolivia.

Una especie de "guerra fría", es el término que se acuña para esta segunda etapa, donde bajo el manto de la diplomacia se suscitan negociaciones, amenazas de reinicio de la guerra, desacuerdos y temores, todo en el lapso entre el 12 de junio de 1935, con el cese de hostilidades, y el 21 de julio de 1938, cuando se firma el Tratado de Paz, Amistad y Límites.

Cuando se compara el actual mapa de Bolivia y el de las pérdidas territoriales se concluye que el país perdió territorio en al menos 11 batallas internacionales. La Guerra del Chaco no debería entrar en esa categoría porque Bolivia no perdió esa guerra, más al contrario logró sus objetivos. Se menciona la salida que logró el país a la hidrovía Paraguay-Paraná, que llega al Atlántico, y la mantención de los campos petrolíferos y gasíferos (sic).

En décadas anteriores a 1932, Bolivia y Paraguay se disputaron la soberanía del Chaco boreal, así lo revelan los tratados alcanzados en 1879, 1887, 1894 y 1907. A esto se suma los asentamientos humanos; por un lado, los bolivianos con fortines esparcidos en ese territorio y, por el otro, colonias menonitas del lado paraguayo que se asentaron esporádicamente en el lugar. "Lo que queda claro es que antes de la guerra, el Chaco estaba dividido en dos, pero distintos eran los trazos limítrofes".

En ese entendido es que luego de la firma del Tratado de Paz, Amistad y Límites del 21 de julio de 1938, que dicho sea de paso declara que la guerra terminó "sin vencedores ni vencidos".

EL CESE DE HOSTILIDADES

Y EL CESE AL FUEGO

El protocolo de paz entre Paraguay y Bolivia que puso fin a la sangrienta guerra de tres años entre ambas naciones fue firmado, un 12 de junio de 1935 en Buenos Aires, con la presencia de los representantes de Argentina, Chile, Brasil, Estados Unidos, Perú y Uruguay, y los Ministros de Relaciones Exteriores de los países beligerantes, para el cese definitivo de las hostilidades en la Guerra del Chaco.

El día 14, el Comandante en Jefe del Ejército paraguayo lanzó el último comunicado de la Contienda chaqueña, anunciando que, a las 12 horas, había cesado el fuego en el frente de operaciones, paraguayos y bolivianos se abrazaron en medio de una emotiva y feliz alegría, con explosiones de júbilo y algarabía. Los tres años de cruenta lucha quedaban atrás.

FINAL

A 84 años del cese de hostilidades de la cruenta guerra en las candentes arenas del Chaco, el autor del presente artículo rinde su sincero homenaje de admiración a quienes pisaron in situ ese territorio, demostrando valentía y heroísmo. De todos ellos?, como héroes que quedaron como impronta son:

Lino Alarcón Ruiz (Sargento Primero), y Pacífico Álvarez Fernández; Sargento Segundo, portando medallas de reconocimiento por su valeroso y heroico desempeño en la Guerra del Chaco. La historia sobre este particular, es la que honra a éstos valerosos combatientes.

Para tus amigos: