Cuando uno quiere, puede

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En un artículo escrito por Juan Pablo Gómez Alconz para el libro memoria de la "Tercera Jornada Departamental de Historia de la Medicina", se describe en su primer párrafo, "Escribir acerca de la vida del Dr. Alberto Montecinos García, es relatar parte de la historia médica de nuestra ciudad"; esas palabras se deben al importante y enorme legado que el protagonista de esta historia deja.

Walter Alberto Montecinos García es un orureño que marcó historia dentro de este bello departamento, nació en Oruro el 25 de mayo de 1931 y su vida es un claro ejemplo de que con esfuerzo, perseverancia, superación y fuerza de voluntad todo se puede lograr, sin importar los obstáculos que te ponga la vida, dones con los que no muchas personas cuentan, pero que hacen del doctor Montecinos y su historia un modelo para nuevas generaciones.

A pesar de que su vida no estuvo llena de grandes riquezas y tuvo que atravesar muchos obstáculos en el camino, ahora con algo más de 80 años siente que cumplió con todas sus metas, demostrando que cuando uno quiere, puede lograr todo lo que se proponga.

SU VIDA

Desde muy joven quedó huérfano junto a sus tres hermanos, cuando su padre Rodolfo Montecinos Clavel fue reclutado por las Fuerzas Armadas, a causa del conflicto bélico que estalló entre Bolivia y Paraguay, por el control del Chaco Boreal; su padre murió heroicamente en el Fortín "Ibibobo" el 28 de diciembre de 1934, en defensa de la Patria. Walter Alberto y sus tres hermanos lucharon para salir adelante y lograr mantenerse en la época de la postguerra, donde Bolivia afrontaba una etapa de conflictos internos.

Con mucho sacrificio logró concluir sus estudios en el Colegio Nacional Simón Bolívar y cumplir con el servicio militar obligatorio.

Como a muchas personas les pasa, el doctor Montecinos no sabía qué carrera elegir para sus estudios superiores, pero llegó el rumor de que la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), estaba recibiendo alumnos para la Facultad de Medicina y se embarcó en un viaje a otro departamento con una maleta en mano y acompañado de algunos amigos.

Al terminar sus estudios como médico cirujano, fue designado para cumplir sus funciones en el departamento de Potosí, en los centros mineros de Catavi- Siglo XX en el año 1961, donde se quedó y atendió a los heridos que fueron reprimidos durante el gobierno de René Barrientos.

Fue en esa época que vio su verdadera vocación, al darse cuenta de que en nuestro país faltaban médicos pediatras, en 1971, viajó al Brasil a hacer su especialidad.

Al concluir sus estudios en el campo de la pediatría volvió a Bolivia y empezó a trabajar en la Caja Nacional de Seguridad Social (CNSS, actualmente Caja Nacional de Salud) del departamento de Oruro.

SU LEGADO

Entre las obras más resaltantes, cuando volvió al país, está la creación del Servicio de Pediatría del Hospital Obrero N°4 de Oruro.

Una de las actividades más importantes en su vida fue el haber liderado el Colegio Médico de Oruro y fungir como presidente durante tres gestiones consecutivas, tiempo en el que logró cumplir uno de sus más grandes anhelos, iniciar la construcción de la actual sede de la entidad colegiada, con los aportes de todos los afiliados y donaciones de algunos galenos orureños que residían en el exterior, como Willy Rendón.

En una de sus últimas visitas a dicha institución junto con su colega y amigo de vida, Rendón, sostuvo: "Han trabajado", dos palabras que reconocen el esfuerzo conjunto de las posteriores directivas que tuvo el Colegio Médico de Oruro.

También fungió como presidente fundador de la Sociedad de Pediatría del departamento de Oruro llegando a ser uno de los pediatras más reconocidos de nuestra ciudad.

Por azares de la vida en la época de 1996 a 1999, Montecinos fue elegido por voto popular como concejal munícipe de Oruro, presidiendo la Comisión de Salud y viendo los altos índices de desnutrición en la comunidad estudiantil basándose en los datos estadísticos, fue que, por primera vez, dentro del municipio, se entregó el desayuno escolar a las diferentes Unidades Educativas.

Posteriormente, fue elegido por voto unánime en el Concejo en 1999 para fungir como honorable alcalde del municipio de Oruro, curiosamente, en ese mismo año el Colegio Médico de Oruro cumplía sus 25 años de vida.

Durante toda su vida profesional predominaron sus valores y principios morales, llegando a ser un médico de vocación, proporcionando atención a quien lo necesite sin preocuparse por los costos o regatear por su trabajo, siendo conocido como "médico de pobres", precisamente por su humanidad.

SU FAMILIA

Alberto Montecinos tuvo la suerte de contar con el incansable y firme apoyo de su esposa, la profesora Claudina Vargas, con quien lleva casado 63 años, demostrando el dicho "detrás de un gran hombre se encuentra una gran mujer".

Junto a su esposa, formaron una familia con siete hijos, de quienes Montecinos se siente orgulloso.

Fuente: Por: Alejandra Montecinos Juaniquina