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Sábado 29 de junio de 2019

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Revista Tu Espacio

PSICOLOGÍA

La terapia en el divorcio

29 jun 2019

Por: Lic Mg. Sc. (c) Rodrigo Aliendre Ramírez - Exclusivo para Tu espacio

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En el anterior artículo se ha explicado todo el proceso de ruptura del divorcio y las etapas a nivel psicológico y emocional que contempla la negación, la ira o rabia, la negociación, la depresión y la aceptación. Se debe considerar que la separación no solo es física, económica y judicial, sino que el proceso psicológico y emocional es un factor primordial, por lo mismo explicaremos la terapia psicológica en el divorcio (familiar e individual) y los beneficios de acudir a un profesional especializado.

La terapia psicológica en el divorcio, implicará no solo a cada uno de los exesposos (terapia individual), sino a todo el núcleo familiar (terapia familiar), en el acompañamiento a nivel emocional, así como a entender y/o comprender que la estructura y dinámica familiar cambiará y por ende se creará una nueva. La situación de los hijos, suele ser una de las preocupaciones constantes para la expareja, pues las consecuencias sobre todo emocionales o psicológicas que trae el divorcio creará constante incertidumbre y por supuesto los hijos sentirán confusión y miedo por lo que pasará con ellos, pues muchas veces el divorcio es concebido como que todo se acabó o destruyó, sin embargo; es un cambio que implicará un proceso adaptativo, de asimilación y acomodación en todo este proceso. La familia al sufrir tantos cambios hace que los hijos se vean atrapados y en algún momento influenciados por alguno de los progenitores (alienación parental), regularmente cuando continúan los conflictos de la pareja o la familia, haciendo que sea más difícil adaptarse a estos cambios de dinámica familiar.

La terapia psicológica en el divorcio, implicará no solo a cada uno de los exesposos (terapia individual), sino a todo el núcleo familiar (terapia familiar), en el acompañamiento a nivel emocional, así como a entender y/o comprender que la estructura y dinámica familiar cambiará y por ende se creará una nueva. La situación de los hijos, suele ser una de las preocupaciones constantes para la expareja, pues las consecuencias sobre todo emocionales o psicológicas que trae el divorcio creará constante incertidumbre y por supuesto los hijos sentirán confusión y miedo por lo que pasará con ellos, pues muchas veces el divorcio es concebido como que todo se acabó o destruyó, sin embargo; es un cambio que implicará un proceso adaptativo, de asimilación y acomodación en todo este proceso. La familia al sufrir tantos cambios hace que los hijos se vean atrapados y en algún momento influenciados por alguno de los progenitores (alienación parental), regularmente cuando continúan los conflictos de la pareja o la familia, haciendo que sea más difícil adaptarse a estos cambios de dinámica familiar.

La terapia psicológica familiar, brindará el espacio necesario a cada miembro de la familia y explicará cómo están viviendo esta situación, pues la expareja tendrá que comprender que dejan de ser marido y mujer, pero no dejan de ser padres para asumir la responsabilidad de sus decisiones, ya que en muchos casos son los hijos quienes tienen ideaciones erróneas respecto a la separación de sus progenitores sintiéndose culpables y responsables del divorcio, por lo mismo es importante recalcar que ellos no son responsables de lo que ocurrió y que son independientes al conflicto de pareja que generó el divorcio. También es fundamental entender que este proceso de divorcio será complicado y resultará doloroso para todas las partes, por lo mismo todo el sistema familiar tiene que tener garantías de buena comunicación y coordinación para generar estabilidad emocional y conductual, así como la funcionalidad en los entornos donde se desarrollan.

El divorcio, trae a la pareja frustración, desesperación y sufrimiento, que muchas veces no es posible superar sin ayuda, y el paso del tiempo no suele ser la solución más adecuada, siendo que de manera directa o indirecta acuden al psicólogo para recibir ayuda especializada, y será el profesional experto en terapia del divorcio (individual), quien ayudará y brindará los elementos terapéuticos necesario para adaptarse a su nueva vida, orientará trabajar en la autoestima, auto concepto, proyecto de vida, elaboración del duelo, entre otros y evitar en muchos casos que los síntomas se agraven hasta llegar a psicopatologías o trastorno mentales.

Ya sea la terapia psicológica individual (terapia de divorcio), terapia psicológica familiar, u otras dependiendo de la escuela psicológica, es importante acudir a un profesional especializado, para superar todo el proceso y etapas del divorcio, y que exista funcionalidad en cada miembro de la familia que en algún momento se vio afectado por esta situación.

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