Familia se opuso a autopsia del fallecido conductor ebrio

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LA PATRIA

La familia del fallecido conductor ebrio, identificado como Iván Marcelo Tarqui Vique de 24 años, se opuso en horas precedentes a la realización de la autopsia de ley, cuyo fin era determinar con certeza la causa de la muerte.

El comandante interino de la Policía Departamental, coronel Rodel Sixto Cano Leaño manifestó ayer que tras lo sucedido el domingo por la tarde y noche en el municipio de Challapata, distante a 120 kilómetros al Sur de la ciudad de Oruro, con la destrucción de una unidad de la Policía Boliviana por gente iracunda, a consecuencia del fallecimiento del mencionado conductor. La familia se negó a la autopsia.

"Tenemos nombres completos de los familiares que han desistido a la autopsia médico legal, han pedido (por) escrito y vamos a hacer las acciones que corresponden en esta oportunidad", aseguró el jefe policial.

ANTECEDENTES

De acuerdo a los datos que brindó, señaló que personal de Tránsito en Challapata, la madrugada del domingo atendió un caso de colisión a vehículo detenido, protagonizado por el conductor que falleció.

En primera instancia se lo llevó a dependencias del Hospital General San Juan de Dios de ese municipio con el objetivo de que sea valorado. Posteriormente, se lo llevó a dependencias de Tránsito, una vez allí presentó convulsiones y de emergencia nuevamente fue trasladado hasta el hospital, sin embargo, en medio camino murió.

Aquella situación desató la ira de los familiares como de algunos allegados quienes sin pensarlo dos veces fueron a destrozar instalaciones policiales. Instantes previos, una llamada anónima alertó a uno de los uniformados, acerca del daño que pretendían hacer a dicho lugar.

Si bien la persona que recibió esa llamada intentó salvar a sus camaradas, la turba prácticamente había llegado al lugar, que como un "tornado" efectuaron destrozos de las oficinas, incluso sin respetar la imagen de un santo que había en el lugar que también fue destrozado sin piedad.

SEGURIDAD

El coronel Cano señaló, que por razones de seguridad, se decidió replegar al personal policial de Challapata, porque no habían las garantías necesarias para que continúen realizando su labor.

Pese a esa situación, se coordinaba con autoridades del Municipio de ese lugar, a fin de reestablecer la paz y la seguridad de los habitantes con la presencia policial.

INVESTIGACIÃ?N

Ante los destrozos ocasionados, el Ministerio Público inició la investigación pertinente por el delito de destrucción y deterioro de bienes del Estado, lesiones graves y leves, y otros en contra de autores, cómplices y encubridores.

Fuente: LA PATRIA