El gran maestro orureño

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"La oración es mejor cuando es una vibración del pensamiento o cuando son dos palabras dichas con fe"

Marcos Beltrán Ávila

Cuando hablamos de; "El Gran Maestro Orureño", nos referimos al ilustre y distinguido profesor e historiador "Marcos Beltrán Ávila", que desde muy joven se ha dedicado a la investigación de asuntos históricos, fue uno de los mejores historiadores del país.

Durante largo tiempo fue maestro de Historia del Colegio de Ciencias y Artes de Oruro "Simón Bolívar", habiendo sido nombrado después Director del mismo plantel con beneplácito de todos, este nombramiento fue visto por el pueblo de Oruro como un premio a su esclarecido talento y tesonera labor en pro de la instrucción pública.

Este notable caballero aportó de muchas formas a la educación en nuestro departamento ya que fue quien trajo el sistema co-educacional a su Colegio Bolívar, procedimiento de enseñanza que imitó de la Escuela de Maestros en Sucre. Esto permitió abrir las puertas del porvenir de muchas señoritas que deseaban ilustrarse y ser profesionales. De esta manera en 1918 de abre el Libro de Inscripciones para hacer la prueba por una gestión, pero esto continuó sin ninguna novedad y con el mayor éxito.

En 1919 fue el encargado de inaugurar el nuevo pabellón escolar del Bolívar junto al Ministro de Instrucción Claudio Sanjinés. Una vez instalados profesores y alumnos en el nuevo recinto estudiantil, Beltrán Ávila ordeno el colocado de letreros dentro el establecimiento con frases como; "Cuida esta tu casa, Este es el palacio de la enseñanza".

Marcos Beltrán A. fue el encargado de fomentar el amor al Libro a toda la sociedad orureña, tanto a niños, jóvenes y señoritas estudiantes, esto para impulsarles el amor a la lectura, a la investigación personal y propia documentación. De este modo fue que en abril de 1921 creó una hermosa actividad cultura denominada "La Fiesta del Libro".

Cuatro abriles después le tocó ser testigo de una escena muy triste cuando vio a las señoritas estudiantes despedirse con lágrimas en los ojos de su querido Colegio Bolívar para dar paso a su nuevo plantel que llevaría el nombre de Liceo Dalence de Oruro, cuyas actividades las inaugura el propio Beltrán como Rector interino.

En 1923 fue jubilado por resolución del Senado Nacional, poco después viajó a Sevilla con objeto de complementar algunos estudios sobre los sucesos de Oruro en 1781, cuando retorno a su ciudad natal, dio una serie de interesantes conferencias y fue en 1924 que escribe; "Historia Colonial de Oruro", con ayuda de sus ex estudiantes del Bolívar, Fernando Loayza Beltrán y Rafael A. Rayeros, ambos estudiantes de Derecho que con su vieja máquina de escribir sacaron y corrigieron los capítulos de esa hermosa obra.

Y en agradecimiento a todos los años de servicio en favor de la educación nacional y sobre todo orureña, en 1954 recibió del Dr. Víctor Paz Esstensoro, Presidente de la República de ese entonces la mayor condecoración que otorga el país el, "Cóndor de los Andes" en Grado de Oficial. Fue un orgullo para el Gran Maestro recibir tan preciado galardón, y de manos de quien fue en otrora su estudiante y a quien alguna vez Don Marcos le dio unos buenos cocachos.

Agradecidos a este gran pedagogo por inculcar ese amor a los libros que tanta falta hace en la actualidad. Don Marcos Beltrán maestro de vida austera, se consagró a la lectura selecta, porque lo que dice Leibniz, "Los libros son hijos de otros libros, y lo presente este lleno de lo pasado, engendra lo porvenir".

Oruro siempre contribuyó con hombres de letras de acervo nacional, con poca producción literaria; pero con talento y con mucho entusiasmo en la depauperada vida mental de esta porción del solar boliviano.

Esta tierra de Pagador dio y da, hombres de pluma, citar nombres de escritores es paladear el almíbar de las mieses helénicas, en la banqueta de la constante lectura.

Mi reverencia a este Gran Maestro Orureño�?