Regalías mineras compensan explotación de estos recursos

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De una manera generalizada, primero las autoridades, luego los dirigentes y después la población, viven pendientes del aporte que genera la actividad minera y que se convierte, en algunos casos, como una importante fuente de ingresos que manejados en las Gobernaciones y en menor porcentaje en los municipios donde se cumplen tareas de explotación de recursos naturales, pueden ser de hidrocarburos o mineros, permiten impulsar proyectos de desarrollo, aunque se estima necesario el uso de un porcentaje aceptable en los planes de prospección y exploración de yacimientos.

El dicho "del mismo cuero salen las correas", se apropia a ésta situación, de modo que parte importante de la regalía debería destinarse a financiar parte de los proyectos de exploración minera y recibir además un soporte extraordinario del Estado para que estos culminen positivamente y se diversifique la actividad minera, generando más fuentes de empleo y posteriormente más regalías.

Cómo se produce la regalía minera? Sencillamente es una especie de impuesto que pagan o compensación que hacen las empresas concesionarias de áreas para la explotación de recursos naturales no renovables como el petróleo o minerales.

En la gestión pasada se produjo un crecimiento interesante en diversos rubros y de manera especial en los que emergen de la naturaleza, los recursos no renovables como petróleo y minerales, que facilitaron la obtención de mejores ingresos gracias a un proceso sostenido de precios para la venta lo que permitió mejorar nuestras exportaciones, con ciertas variantes en cada caso, pero igualmente alentadoras a mejorar los volúmenes de producción.

Se aclara que los minerales y metales que fueron exportados y que generaron una buena regalía para los gobiernos departamentales y para los municipios productores, fueron principalmente el oro, la plata, zinc, estaño y plomo, aclarando que el único metálico de alto precio y calidad, sigue siendo el que se produce en la fundición de Vinto en Oruro. La esperanza es que en la presente gestión se consolide la producción total en Karachipampa, para tener otro rubro de exportación de metales, como plomo y plata en lingotes. Faltan detalles para concretar otro rubro de exportación de zinc fundido, es la implementación de una nueva fundición que ubicada en el Complejo Metalúrgico de Vinto lanzará el producto con valor agregado, para recuperar un precio de orden competitivo a nivel internacional. En el caso de Oruro deberán completarse las gestiones para que las regalías de la venta de metálicos sirvan al desarrollo regional y se paguen en el lugar de su producción.

Datos proporcionados por el Viceministro de Política Minera, Gualberto Hochkofler, señalaban que hasta el mes de agosto de la gestión pasada (2018) la recaudación de regalías alcanzó a la cifra de Bs.- 845.169,679 millones, lo que significó un incremento de 11,26 % respecto a igual periodo del 2017. El informe se complementa al remarcar que también aumentó el volumen de producción que según la autoridad, se elevó en 18 % es decir de 424.378 TMF el 2017 a 499.948 TMF en igual periodo del 2018.

Con ese movimiento de producción de concentrados y su exportación, el distrito de Potosí sigue siendo el mayor beneficiado con regalías mineras que entre enero y agosto 2018, logró el 67,4 % del total, es decir 570.1 millones de bolivianos. En el mismo tiempo La Paz obtuvo 13,1 % que significa Bs 111,2 Millones, dejando el tercer lugar para Oruro con el 7.7 % que cuenta 64.8 millones de bolivianos, un ingreso reducido debido a la falta de proyectos mineros en ejecución. No se cuentan en el caso de Oruro, regalías por estaño metálico, que se consignan a favor de La Paz.

Este es el panorama sobre el tema de regalías mineras, un aporte de las empresas extractivas mineras como compensación al uso de los recursos mineros. Los datos de este movimiento económico corresponden a los que maneja el vice ministerio de política minera, regulación y fiscalización.

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