Aseguran mercados externos para compra de litio boliviano

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El negocio del litio boliviano parece estar seguro, los expertos señalan "parece" considerando que en los varios años que se desarrolla el proyecto, evidentemente se han logrado avances significativos, pero hasta ahora ninguno puede ser tomado en cuenta como de "orden efectivamente productivo". La industrialización del litio es ya un largo proceso que demandará todavía mucho tiempo, considerando que de acuerdo a un "plan estratégico nacional" se consigna la necesidad de construir y poner en marcha 14 plantas principales y otras 20 industrias de insumos y se añadirán 7 más para subproductos.

Cuando se mencionan tales perspectivas, es natural que se observe el plan global y que se tome en cuenta dos factores ineludibles y que constituyen la parte de la "gran preocupación nacional", son financiamiento adecuado y tiempo necesario para no quedar rezagados en la carrera industrial de litio.

Una de las últimas propuestas extrajeras sobre el tema del litio, fue oficializada por el Mandatario de la India que visitó el país y aseguró el marcado interés de formar parte de la estrategia nacional, disponiendo apoyo financiero y desplegando su experiencia y tecnología en la industria de litio, particularmente en la producción de carbonato de litio, un subproducto que también tiene alta demanda en el país asiático que cuenta con muchos contactos para vender ese producto. La India ha propuesto una "alianza estratégica", que al confirmarse facilitará el avance del plan estratégico nacional.

Es bueno recordar en este trance las frecuentes declaraciones de nuestro mandatario y de otras autoridades ligadas al proyecto del litio, cuando han remarcado la necesidad de cuidar "la soberanía tecnológica nacional", pues no otra cosa significa la habilitación de varias plantas de experimentación, para alcanzar el objetivo de lanzar productos con el sello "Hecho en Bolivia".

Cuando se iniciaba el proyecto, se recuerda que el Presidente de Bolivia, sugirió incluso la instalación de una ensambladora de vehículos para diversificar la industrialización del país y generar miles de empleos seguros. Hay que ir por partes, dando pasos seguros, se insinuó en esa ocasión y pasado el tiempo, se observa que nos falta cumplir aún instancias importantes para encarar la producción de baterías de litio por cuenta propia y asegurar la producción de sub productos para completar una gigante cadena industrial que consuma con plena seguridad la fabulosa cantidad del litio en los salares de Uyuni en Potosí y Coipasa en Oruro.

El pasado mes de marzo el Primer Mandatario, oficializó que "para la instalación de 14 plantas, se garantiza entre Bolivia, China y Alemania, un financiamiento de 4.400 millones de dólares y con esas factorías en pleno funcionamiento se aseguran ingresos anuales por valor de 5.000 millones de dólares". Una proyección técnica económica que está incluida en la agenda de operaciones inmediatas en el salar de Uyuni.

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