Templo de San Agustín de Toledo es una verdadera joya del Altiplano

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El templo de San Agustín del municipio de Toledo, es considerada una de las más antiguas del Altiplano boliviano, porque su data es del siglo XVI, estuvo bastante descuidada por varios años, ahora, gracias al apoyo de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), quien logró restaurar toda la estructura, es considerada como una verdadera "joya" de la arquitectura nacional.

La restauración del templo se realizó con un financiamiento de la CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, gracias al programa de responsabilidad social y ambiental, en la construcción de la carretera Toledo-Ancaravi, que es parte del corredor Oruro-Pisiga.

Esta entrega se realizó ante el agradecimiento de toda la comunidad del municipio de Toledo, el alcalde Martín Colque, afirmó que a partir de la fecha se tiene que trabajar en promocionar este espacio y cuidarlo para que sea una buena opción para la visita de turistas nacionales e internacionales.

Asimismo, el obispo de la Diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik, agradeció este desprendimiento del Gobierno Nacional a través de la ABC, porque recordó que cuando conoció el templo hace algo más de 14 años, era un nido de palomas y el deterioro era significativo, pero ahora es una muestra de la grandeza arquitectónica en el Altiplano boliviano.

LEY

El gobernador del departamento de Oruro, Víctor Hugo Vásquez, aseguró que es importante el trabajo que se realiza en todo el país para recuperar edificaciones patrimoniales, pero ahora pasa por su preservación y cuidado, por ello a través de la Ley Departamental Nº 166 del 27 de Febrero de 2019, se declara Patrimonio Arquitectónico, Histórico y Cultural del Departamento de Oruro a la Iglesia Colonial de San Agustín de Toledo. Documento que se entregó de manera oficial a este Municipio.

RESTAURACIÃ?N

La Iglesia de San Agustín de Toledo está construida en una superficie de 580 metros cuadrados, en una estructura de adobe de una sola nave en forma de cruz latina, con una sacristía, pila bautismal y coro alto. En el exterior, la portada de piedra tallada corresponde al estilo barroco mestizo.

Una de las características de la región, es la humedad por capilaridad, lo que deterioró la estructura, construyendo ductos aireados a lo largo del muro para contrarrestar futuros problemas.

El daño de la cubierta fue importante, por ello se implementó un nuevo diseño de cubiertas, respetando la estructura original. La torre del campanario, también fue rescatada gracias a un trabajo arduo de restauración.

La restauración integral del templo le devolvió un valor histórico y patrimonial, principalmente porque se rescataron las obras de arte que comprende el retablo mayor, los altares laterales, las esculturas, el púlpito, el santo sepulcro, los muebles y el órgano de fuelle.

Se restauraron y recuperaron 40 imágenes escultóricas distribuidas en diferentes lugares del templo.

Fuente: LA PATRIA