Aterrador

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Era un día de sol, el clima de otoño era más que sentido en la comunidad Jiwaña, central Chariri del municipio de Toledo, distante a 40 kilómetros aproximadamente al Occidente de la ciudad de Oruro. Muy temprano del lunes, el trabajador del agro, Luis (nombre ficticio), se dirigió a su terreno con el objetivo trabajar en su sembradío, sin embargo, no sabía que el destino le tendría preparada una sorpresa.

Alistó todas sus herramientas con el objetivo de cosechar la papa que había sembrado. Comenzó la faena como cualquier jornada, sin embargo, con el paso de los minutos y al acercarse a uno de los espacios de su sembradío, removió la tierra y encontró algo que le hizo estremecer el cuerpo.

En principio no daba crédito a lo que veía, pensó que se encontraba en una especie de pesadilla estando despierto, pero luego de abrir nuevamente sus ojos se sorprendió al encontrar una calavera humana.

No salía de su asombro, cuando continuó removiendo la tierra y encontró una segunda cabeza, además de varios huesos. Quedó sorprendido por el hallazgo, estaba estupefacto, con miedo, porque se encontraba con algo macabro.

No podía creer que en el lugar donde sembraba papa, era una especie de cementerio o quizá una fosa que en algún espacio del tiempo sirvió para dejar esos dos cuerpos, ahora convertidos solamente en simples huesos.

POLICÍA

Tras el hallazgo que lo dejó conmovido, se dirigió hacia las autoridades para comunicar lo sucedido. Ya en horas de la tarde del lunes, llegó al lugar el personal de las divisiones de Homicidios y de la Escena del Crimen de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc-Oruro), con el fin de evidenciar el hallazgo.

Asimismo, estuvieron presentes representantes del Ministerio Público para dar fe al actuado.

El director de la Felcc, coronel Manuel Vergara Sandoval manifestó ayer que se encontraron dos cráneos humanos, además de restos óseos y cuya data de muerte sería de aproximadamente 30 años.

Lo que hace presumir que esos cuerpos fueron dejados en el lugar a fines de los 80 e inicios de los 90 del siglo pasado. El caso está en investigación con el objetivo de por los menos conocer a ciencia cierta la data exacta de la muerte de ambas personas, además de su sexo.

Fuente: LA PATRIA